viernes, 27 de junio de 2008

Mi esposa

Mi esposa es una mujer única. En serio. No pasa un solo dia sin que me sorprenda. Y no me refiero a que me sorprende con los calzoncillos en las rodillas charlando con las vecinas. No.

Cada dia, me sorprende de una forma, valga la redundancia, que me sorprende. Hay dias en que la amo ciegamente, hay dias en que me ataca una rabia ciega contra ella, los menos, pero los hay.

Pero hoy, como muchas veces, me despertó con un cachetazo intelectual importante. Hoy me empezó a describir las similitudes entre las monarquias, o los feudalismos, y la actual democracia Argentina. Y para mi mayor sorpresa, las coincidencias son muchisimas. Estas son algunas de las cositas que me dijo hoy mientrs luchaba por no dormirme manejando.

.- Los impuestos desmedidos a los trabajadores.
.- La concentracion de poder
.- Los entonces bandidos y hoy "asistidos sociales"
.- El clero (siempre fue igual)
.- Las familias adineradas disponiendo de la gente mas pobre, como sus siervos.

La noticia que disparo esto, fue que en General Deheza (un pueblo "sojero" y aceitero de Cordoba), a un chico con discapacidad mental, lo invitaron a una casa, donde al llegar, los nenes adinerados lo golpearon salvajemente, para despues rociarlo con combustible y prenderlo fuego. Por suerte, la casa contaba con una pileta y el chico corrio a ella, salvando asi su vida.
El castigo para esos "nenes", fue condenarlos a prestar servicios comunitarios 2 horas a la semana, mientras que a los padres se los obliga a ir a terapia sicologica (ante lo cual pusieron el grito en el cielo). ¿El cargo?... ¡LESIONES LEVES!.
Un juez de Rio cuarto considero que no era un intento de homicidio, ni las consecuencias sicologicas de la victima o de sus padres. No. Debe haber pensado : "bah, si el tonto apenas se chamuscó un poquito nomás"

El dinero, compra justicia, o impunidad. En todos los pueblos de este pais pasa lo mismo. No asi en las ciudades donde debe seguirse cierto proceso, y es un poquito, solo un poquito mas dificil zafar de una condena merecida. Casos les puedo contar cientos. Si sos pobre y matas a alguien, es infalible, te "suicidas" en la comisaria. Si tenes muchisimo dinero, no llegas a conocer una reja mas que la de tu casa, y estoy hablando de TOTAL impunidad para hacer lo que quieras con los demas. Cualquier hijo de medico, abogado, politico, o empresario agricola, puede literalmente, hacer lo que quiera. Total, mi papa conoce a tal o cual y en 5 minutos se arregla, y a mi me hacen llevarle flores al cementerio a la victima y chau.

Feudalismo. O monarquia. Lo mismo da. Las oportunidades no son las mismas para todos. Igual que la justicia.

Dueño de la tierra, dueño de la gente.

miércoles, 25 de junio de 2008

Romper la rutina (II Parte)

(se recomienda leer la primer parte acá)

El Jueves ni apareció por la rotisería de Irma. Por un viejo consejo de alguna amistad adolescente, dejó que pasara ese día de suspenso. Sabía que ellas se empiezan a enroscar en sus pensamientos cuando no las llaman. Y eso, lamentablemente, redunda en beneficios para los caballeros.

Las imágenes en la cabeza de Bruno se parecían mas al infierno que al cielo. Parecían una reversión de la película "Calígula", pero solo con una persona en escena: Irma, la rotisera. ¿Se llamaría Irma realmente?

Recordó que había un teléfono semipúblico en el kiosco de al lado de la rotisería, y se le cruzó llamarla desde ahí, para ver si el celular sonaba y si la tal Irma atendía. Descartó la idea por infantil.
Por supuesto, nadie sabía de esta novedad en su vida. ¿Para que quemar una oportunidad tan buena, contándosela a alguno de sus envidiosos compañeros?. Recordó lo que decían las sabias abuelas : “¡no lo cuentes que lo quemás!”
Bruno recordó también la aversión que le provocaban sus compañeros. De todos ellos, a la única que realmente apreciaba, era a Malena, esa chica tímida, desgarbada, bonita a su modo, que era mejor persona que todos los otros gusanos juntos.

¡Puta si se habrá aguantado las jodas y comentarios maliciosos de esos infelices!

Malena confiaba en el, y el en ella. Punto. Esa era su sencilla (y envidiable) relación. Confiaban. Y se cuidaban mutuamente.

Esa mañana, Bruno le fué a comprar las consabidas galletitas de cada mañana, y le trajo además, una confesión.

- Male, había estas de salvado, o con semillas de lino, o de huevo podrido.
- Gracias! - dijo riendo - Prefería las de huevo, pero estas están bien...
- Te tengo que contar algo... pedirte un consejo...
- Decime
- Bueno... Resulta que hay una chica que trabaja acá a la...
- Pará... - dijo ella cortándolo en seco - ¿que te gusta de ella?
- Ehhh... - respondió el, incomodo – y es así como... o sea, tiene...
- Es linda, ¿no?
- Y…
- O no, pará, seguro que tiene un cuerpo re lindo...
- Bueno, si, pero lo que mas...
- Mirá Bruno, Probá. Sacate la duda. Pero hasta que no te des cuenta de que eso no es lo mas importante, vas a seguir flotando en ese mar lleno de los restos de tus anteriores naufragios…

Bruno se quedo con los ojos abiertos y la boca cerrada. Ella se volvió a la pantalla de su computadora. Le habían asestado una clase dificilísima de digerir. Ella tenía razón. Y la imagen del naufragio no admitía más palabras.

Volvió a su silla. Busco apoyo en alguna parte, ante ese gancho a la mandíbula, pero solo lo rodeaban esos cubículos horrendos e inhumanos que existen solamente en las oficinas. Cada tanto, alguno de los gusanos se asomaba como una suricata, mordisqueando algo, con su taza en la mano, y viendo si enganchaba a alguien en falta, como para tener material para su próximo acto cómico en la cocina del piso.

Cada tanto se asomaba al cubículo de Malena para mirarla. Ella, con su simpatia, le sonreía. El le pidió disculpas, y ella respondió que no había nada que disculpar. Se conectaban de maravillas. Se divertian juntos. Y nada mas.

Ella era tan sincera con el, que agradeció a la vida haberla conocido, y rememoró todos los momentos que habían disfrutado fuera de ese horrible lugar. Recordó el casamiento del atorrante de Gutiérrez, en el que bailaron y se rieron a carcajadas, y hasta hicieron una competencia para ver quien tomaba mas champagne. Por supuesto, la ganó ella.

Recordó también la despedida de Puchetti, que se jubiló, y con él se fué el último de los tipos piolas. Esa noche se quedaron charlando con el “viejo” hasta las 2 de la mañana, de libros, de fútbol, de la obertura 1812 de Tchaikovski y de las fuerzas de Napoleón en Rusia. El la acompañó hasta la casa aquella noche… Era un buen tipo Puchetti. Lástima que murió de depresión a los 6 meses de haberse ido.

De pronto, lo asaltó la idea de que tal vez, solo tal vez, Malena no quería ser su amiga. Ella había sido lo más parecido a una compañera que había conocido. Sabían todo de sus vidas, y por mutuo acuerdo habían dejado de ser desconocidos.

Se obligó a desviar ese pensamiento de su cabeza. Habían desaparecido de pronto el infierno del Dante y los fotogramas de Calígula con Irma la rotisera. Intentó imaginarse fundido en un abrazo con Malena, o besando sus labios, o incluso, haciéndole el amor. Pero no pudo llegar a eso. Se quedó en el beso, y no se sintió bien. Tuvo la misma sensación que se tiene cuando se entra a un negocio y no hay nadie atendiendo, o como de entrar a una casa sin ser invitado. Esa sensación de estar en el lugar equivocado.

No. No podría siquiera besarla. Ella era su amiga. En cambio, la morocha... Marcó los números del celular de Irma. Atendió esa voz, esa llamada al naufragio en la cubierta del Titanic, ese canto de las sirenas, esa música que encantaba serpientes.

- ¿Hola?
- Ho... hola... Bruno... habla. Habla Bruno.
- Hola Brunito, - bruno sintió su corazón desbocado - estaba esperando que me llames.
- Hoy salgo tarde de acá. Me preguntaba si te gustaría ir a algún lado hoy conmigo.
- Si, a mi casa.

Bruno se quedó sin réplica. Por segunda vez en un solo día, se quedó sin nada que decir. Y ella otra vez lo había avasallado, como ese miércoles, y sabia que podía jugar con el como el gato sabe de la vulnerabilidad del ratón.

Ella ofrecía algo más que charlar, y Bruno lo sabia. Sin vuelta atrás. Si aceptaba, moriría en sus brazos y sus pechos esa noche. Si no aceptaba, la noticia se iba a propagar e iba a quedar como el más cobarde entre todos los de esa madriguera. En ambos casos era una cuestión de honor.

En el primero, era el honor para si mismo, en el segundo, era su honor para los demás.

- La verdad es que yo llamaba para salir a caminar un rato.
- Bueno, podés caminar hasta mi casa Brunito - le dijo ella con un tono sarcástico.
- ¿A las ocho esta bien?. Yo de acá salgo a las...
- Te espero en la puerta. Ah, estuve pensando mucho en vos.
- Si, yo también. (Bruno recordó las imágenes)
- Chau
- Entonces... - ella cortó antes que el – chau Irma...

Hasta las ocho, Bruno dio vueltas, tomó agua, se sentó, revisó los correos, aguantó al pelado imbecil de su jefe en una reunión sin sentido, escuchó música... y pensó. Pensó muchísimo. Pensó en ella. Pensó en que seria de su vida, después de ese día. Se aflojó la corbata y miró el reloj.

19:30, y el tiempo se le antojó implacable. Bajó a las 20:00, y a media cuadra, estaba ella, el demonio en persona, la promesa de una noche furiosa y la esperanza de poder salir vivo de eso.

Fueron al departamento de la morocha, a 10 cuadras de donde estaban. En cada pared poco iluminada, en cada ventana discreta, en cada árbol, ella lo arrinconaba, y le brindaba su boca, bien abierta, dulce, cruel. El respondía con entusiasmo. 10 cuadras. Un kilómetro, mil metros, cientos de besos, cientos de lenguas tanteándose. Ella era suave de a ratos, bestial en otros, y el solo respondía como sabia hacerlo. Bruno era de acariciar y mirar a los ojos.

Llegaron y entraron Y arrancaron en el ascensor. En el 3° piso ya no les quedaba ningún rincón por tocar, y ni siquiera sabían sus apellidos, de que signo eran, que música preferían.

Irma fue con su boca directo a los botones del pantalón de Bruno. Se detuvo el ascensor, bajaron cautelosos viendo que no haya nadie en el pasillo, salieron y se metieron en el 8°B. Resonó el portazo en los pasillos y las risas apagadas se adivinaron detrás de la puerta.

Bruno salió a las 3 de la mañana. Cansado, golpeado, derrotado, adormecido, feliz, tranquilo... y confundido. El sexo no solo fue mucho. Fue grandioso. Fue caliente y perfumado, fue infantil y fue salvaje, fue húmedo y también sabroso. Pero no fue hermoso, ni maravilloso.

Porque muchas veces, mientras perdía la consciencia, mientras pisaba terreno animal, una palabra lo traía de vuelta a la realidad.

Malena.

(continuará) (Si, otra vez)

Lexico

Cul de sac no es un insulto encubierto. Significa "callejon sin salida".

Se instauro su uso en el lenguaje nacional, junto a otras miles de palabras extranjeras como "sale" en lugar de "venta", "Menage a trois" en lugar de "me estoy comiendo a la vecina y una amiguita juntas", etc.

Este fenomeno, (no, lo de la vecina no, lo de las palabras raras), se denomina "penetracion cultural". Y parece ser algo de toda la vida, al menos en nuestra sociedad, que miró a Europa con nostalgia y admiracion. Ya Roberto Arlt utilizaba el frances (pais a imitar en las decadas del 50 y 60), y el ingles. Y si bien podria deducirse que las sociedades incluyen el vocabulario de sus modelos a seguir, existe un caso curioso. En el idioma ingles no existe nada que referencie la siesta. Por eso, incluyeron esa palabra en su vocabulario. Hoy se la reemplaza por la palabra "nap", que en realidad significa "recostarse", o "apoliyar un rato", pero no sintetiza lo que para muchas culturas significa la siesta.

La mayor aberracion en cuestiones gramaticas y ortograficas, sin embargo, advino con el estallido de las computadoras personales y su consecuente era digital. Palabras como PC, mouse, click, SMS, o print, comenzaron a sonar tan a menudo, que dieron lugar a palabrotas tales como "printear" una planilla, clickear, customizar, esemesear(!), webear, bloguear, chatear, etc. etc.

Hace un tiempo, digamos, unos 5 o 6 años, con alguien llamado Claudio Avila, iniciamos una campaña en nuestro grupo de trabajo, donde se penalizaba a aquellos que utilizaran terminos semejantes en desmedro de su traduccion al castellano. Funciono bastante bien el plan, hasta que Claudio se fue a vivir a Canada a hablar frances e ingles, y yo me fui de Buenos Aires en busca de mi destino. Pero, como experiencia, les recomiendo aplicarlo al menos durante un dia, para darse cuenta de lo mal que estamos hablando sin percibirlo.

Otro tema aparte es la mutilacion y el travestismo que sufren las palabras, que tienen la desgracia de contar con una Q, o las que tienen una C dura. Frases como "¿ke kontas?", o "mndm 1 msj", o "t kiero 1 mntn" son explicitos a la hora de redondear la idea.

He visto paginas completas escritas en este lenguaje absurdo y abreviado. No he podido leerlas, porque mi negacion a aceptar semejante atrocidad es muy grande. Supongo que los contenidos que tenian para brindar, eran igualmente absurdos.

Parece ser que esta conducta, esta fomentada hoy en dia, por la devaluada educacion (mejor dicho, la nula politica en cuestiones educativas), la intromision de la TV hasta en nuestros dormitorios, la escasa lectura... y vaya uno a saber cuantos factores mas.

Alguna vez, alguien me dijo que con mi criterio, deberiamos estar leyendo el castellano del siglo 17, tal vez tenga razon esa aseveracion y yo sea demasiado estructurado, demasiado rigido. Sin embargo, acepto la libre expresion y cada uno es libre de demostrar su nivel cultural como pueda o quiera. Tal vez, el castellano de hoy, sea el castellano oficial del futuro, y tengamos que cambiar nuestra forma de escribir. Tal vez el dia de mañana mis hijos lean los libros de Borges, de Arlt, de mi ex vecino Sabato, y vean lo que fue un castellano rico en recursos, como un castellano antiguo y obsoleto.

El tiempo dirá seguramente, pero a mi, particularmente, el "castellano del futuro" no me termina de gustar.

viernes, 20 de junio de 2008

La situacion que nos hartó a todos

El campo, la sociedad argentina, los transportistas, la sra. presidente. Si, presidente, porque es asi como deberia decirse. Me tienen harto.

Esta crisis empezo con las retenciones a la soja y termino siendo cualquier cosa menos un reclamo, hoy es solo una lucha de poderes. Y claro, le tocaron el bolsillo a los que se la llevan en carretas nissan ultimo modelo. Y que de paso, depredan el suelo que deberian heredar mis hijos en un futuro no tan lejano. Porque la deforestacion que realiza la industria agricola con el boom sojero, ya la estamos pagando en cambios climaticos. No es una deforestacion estudiada, es indiscriminada. Nadie me lo conto, yo he visto todo un monte, miles de arboles, apilados en el centro de un campo. Listos para ser incinerados. Arboles centenarios. Animales aniquilados. Todo sea por la maldita soja.

El argumento pueril que esgrimia entonces la sociedad rural era que, por cada dos camiones de granos de soja que enviarian al puerto, el gobierno se quedaria con uno.

Y entonces, como para golpear al comun de la gente y hacerlos solidarizarse con ellos, decian "¿que dirias si a vos te pagan la mitad de tu sueldo?". Bueno. Pongamoslo al reves.

Ahora, imaginate que a vos te paguen todos los sueldos que podes llegar a ganar en toda tu vida de laburo soportando presiones, en un solo año levantandote a las 5 de la mañana como dicen que se levantan. Toda tu capacidad de generar recursos, te la pagan cada fin de año. Cada semestre recibis la mitad de los beneficios de toda tu vida. O te ganas la loteria cada 3 o 4 años.

Hace eso durante una decada aproximadamente.

De ahi, tenes que pagar algunas fuertes cuentas, y el resto te lo patinas en autos y camionetas, en departamentos, y en casas pagadas a un precio de locos. Con tu enorme caudal monetario moves el mercado, pero mal, porque pagas sobreprecios que se establecen despues como los famosos "valores de mercado". Y con eso, impedis a un monton de pibes que recien empiezan, a que lleguen a tener su casa, porque vos elevas los precios con tus billetes. Y mientras una casa en loma del cornete te la venden a U$S 200 mil (valor de mercado), el banco va y te la tasa a $100 mil, que es el valor real. Y te facilita $75 mil para llegar a tu primer vivienda, a pagar a 35 años. O sea, cuando te jubiles la terminas de pagar. Dentro de 35 años. O sea, condenas a esos pibes a alquilar a los precios que a vos se te ocurran. Y en el medio, tenes la posibilidad de pagarles las carreras a tus hijos, que seran los futuros profesionales de mañana, que tendran de empleados a los hijos de tus inquilinos, que nunca podran asomar la cabeza.

Claro, entiendo, los del campo laburan, y mucho. Pero los que estan gritando, no son los peones, son los que cobran la cosecha. Y ademas, lo de las retenciones tambien se implemento para que haya rotacion de cultivos. Porque la soja da mucha guita, entonces no se planta maiz, trigo, centeno, nada mas que soja. Soja que ni siquiera consumimos aca. Al no haber trigo, la harina se encarecia, encareciendo todos sus derivados. Entonces, me haces mierda el suelo, me haces mierda el mercado inmobiliario, me haces mierda la industria, y la economia de la gente, me haces un casi golpe de estado, me desabasteces comprometiendo el normal crecimiento de mis hijos... y todo porque a vos te pusieron un freno en tu enriquecimiento feroz.

Me parece que no es etico poner en riesgo el futuro de todos.

Ojo, la señora presidente tampoco es de mi agrado. Esto se tendria que haber solucionado hace mucho. Con decision, con conviccion, con capacidad. No hay nada de eso. Y mientras unos lloran (los gringos de campo lloran SIEMPRE) por lo que no ganan, los otros, lloramos por todo lo que perdemos. Y lo que estamos perdiendo es una estabilidad civil, una democracia, una gestion de gobierno (tal vez pesima, pero constitucional), credibilidad, tranquilidad, unidad. Y tantas otras cosas. Y a esta barbarie, se suman todos los demas oprimidos que ven una oportunidad para cortar una ruta y hacerse escuchar. Los transportistas, se suman a esta locura. Y lo peor, es que tienen razon, porque estan sin trabajo.

Esto se transformó en una obscena lucha de poderes. Nadie quiere ceder. Nadie quiere dar muestras de debilidad. Y la mayor muestra de debilidad es la que estan exhibiendo, la de debilidad moral, intelectual, y democratica.

Aca no se trata de molestar al que se va de viaje por el fin de semana largo. Se trata de romper con todo lo que se logro en 25 años de democracia. Quizas no se logro una economia envidiable, ni la solucion a los problemas de fondo de cada argentino. Pero se logro la sensacion de que los golpes de estado habian quedado en el pasado. Se habia logrado la seguridad de que si los gobernantes hacian las cosas mal, en las proximas elecciones se iban. Hoy ya no se sabe nada.

Hoy andamos penando por una gota de combustible, por un kilo de carne, por unos tomates que valen como oro. Y eso, en caso de que encuentres donde comprarlos.

Esta situacion me ha llevado a plantearme seriamente las ganas de ser argentino. Yo ya no se, no se si quiero seguir siendo un habitante de esta tierra. No se si quiero que mi hijo lo sea. Porque aquellos que nos gusta leer un poquito, y aprender mucho, nos damos cuenta de que la historia, tarde o temprano, se repite. Todo lo que fue malo en el pasado, vuelve, con el apoyo de la misma gente, que supone que esta vez va a ser diferente. Escuche a muchos, decir "que vuelvan los militares". Como si esa frase fuera digna de analizarse. Ni siquiera admite debate. Parece que al pueblo le gustara ser subyugado y obligado a no pensar y a acatar. Que vuelva tal o cual, es la frase del dia.

Yo digo que NO.

Probemos a decir "que venga". Que venga un politico estadista en serio. Que venga la paz. Que vengan los buenos tiempos. Que venga el futuro y el bienestar. Podemos pedir que vuelvan ciertas cosas, como la confianza, el progreso, la pujanza de la industria, los argentinos exiliados, la felicidad, los logros. Pero prefiero decir "que vengan".

Que vengan tiempos de soluciones. Y pronto.

Los estamos necesitando.

jueves, 19 de junio de 2008

Cuento 1 - Fatalidad

06:15. Abrió los ojos. Sin querer despertarse se dió cuenta de que ya era hora. Estiró un poco los brazos tensando todos los músculos del cuerpo, hasta los de la cara, que quedan con esa expresión tragicómica. miró hacia la ventana, se tumbó sobre su costado izquierdo. Metió su mano derecha en la entrepierna y se rascó un poco, para sentir esa sensación placentera de todas las mañanas. Después, abrazó la almohada y dijo "10 minutitos mas".

06:15. Abrió los ojos, y se levantó. Encendió el pequeño grabador doble cassettera, recuerdo de su adolescencia. Puso un disco de David Bowie. Se estiró en el lugar, y se dió cuenta que no había apagado la luz del balcón. "Así te va a venir la boleta" pensó. Fugazmente, también pensó que el creía haberse despertado antes a esa hora.

06:15. Abrió los ojos. La cama estaba toda desarmada. Decidió levantarse a pesar de su lucha interna, pero los miembros no lo acompañaban en la tarea, por lo que accedió a bostezar otro rato antes de levantarse. Ahora, estaba seguro de que ya había visto esos números en el reloj. Cerró los ojos un momento para tranquilizarse.

06:15. Se despertó, y esta vez estaba nervioso. Algo estaba sucediendo. O el reloj estaba con un ataque de epilepsia, o se estaba volviendo loco. Saltó de la cama, encendió el TV y puso Crónica. Ahí estaba un panadero mostrando como se le incendiaba toda una herencia familiar. "¡ Mi abuelo levanto esta panadería con sus propias manos, levanto mi abuelo !" gritaba mientras apuntaba con sus manos al fortuito siniestro. Vió la hora, 06:17. Encendió el grabador, pensando que iba a estar el disco de Bowie. No. Sonó en su lugar "Lovely Rita" de The Beatles. Se rascó la cabeza y pensó "¿fue un sueño?". Cerró los ojos tratando de recordar.

06.15. Volvió a despertarse. Esta vez, ya no estaba de humor para nada, la luz del balcón estaba apagada, en el grabador estaba sonando "Walking in my shoes" de Depeche Mode. No se rascó la entrepierna ni se estiró. Se preocupó. Levantó el teléfono para llamar a su madre, pero no recordaba el numero. Además, era muy temprano para despertarlos, y encima con semejante historia. No. Se pellizcó y le dolió bastante. Se dijo a si mismo que esa debería ser la realidad entonces. Fue a la cocina, y la cafetera aun no había empezado a funcionar, porque el timer estaba puesto a las 06:30. La pasó a modo manual, y le rogó que hiciera ese café lo mas rápido posible. Fue a su dormitorio a buscar la ropa para bañarse, y olió el café nuevo en su camino a la ducha. "Ahora si" - se dijo, tranquilizandose. En la ducha, metió la cara abajo de la lluvia para despertarse del todo.

06:15. Sonó el despertador del celular. El aparatito cantó "Farawell" de Pedro Aznar para acompañar la transición entre sueño y realidad. Ahora si estaba preocupado. Y mucho. Levantó el teléfono y llamó a sus padres. No atendía nadie. A esa hora, lo sabia, la gente acostumbra dormir, y mas si son personas que ya no trabajan. Se asomó al frío del balcón y miró abajo. Lo que vió lo llenó de sorpresa. Debajo, estaba el mar. Hasta el piso 7, el edificio había desaparecido, y la vista desde el piso 10 no era nada desagradable, pero la idea de que la ciudad y todos sus conocidos habían desaparecido, no lo reconfortó demasiado. Miró hacia los departamentos de arriba, y vio que sus vecinos estaban igual de asombrados que el, y en su afán de ver a la del piso 17, se estiró demasiado sobre la baranda, cayendo después al agua, 3 pisos mas abajo. Sintió el golpe del agua, y la confusión, entre manotazos y burbujas.

06:15. Se despertó con un grito. Azorado, se encontró en su cama y cubierto de sudor. Salto de la cama, corrió a la ducha, y se bañó mas rápido que nunca. Se vistió, y bajó por el ascensor. Cuando llego al piso 7, esperó que el agua invadiera el ascensor, ahogandolo. No sucedió. Llegó a la planta baja, sacó la llave del bolsillo, y salió al frío aire de la aun noche invernal. Camino conlas manos en los bolsillos hacia la avenida pensando que habría sido todo eso. Intentó concentrarse, descifrar esos sueños rarisimos. Estaba en eso cuando por delante cruzó un zorro plateado mirándolo fijo. Se detuvo en seco, y pensó: "esto es otro sueño". Mientras el zorro se perdía entre los autos estacionados, se frotó la cara y caminó con paso decidido hacia la parada. "Si todo esto fue una pesadilla, aun me falta lo peor. El viaje en colectivo".

Aquella mañana salió la noticia en algún diario, y en las radios mencionaron el hecho solo un par de veces. Un joven había muerto durante la mañana, por un problema con un calefactor y el monóxido de carbono generado.






Por un momento llegó a pensar que podría haber sido el.

martes, 17 de junio de 2008

El dormido

Recuerdo siempre ese dia 20 de Julio.

Cuando nos encontramos ahi, en ese restaurant diente libre en Rivadavia, que alguna vez se llamó Co&cina, celebrabamos otro dia del amigo. Como siempre, entramos serios, y debo aclarar que esta es una estratagema, para que a los dueños del lugar les sea imposible adivinar el quilombo que seguro vamos a hacer. Pedimos un Don Valentin Lacrado, y procedimos a comernos todo lo que se nos ponia en el camino. A la segunda botella de Valentin, las carcajadas eran intolerables. Y las caras de los coreanos tambien, porque vinieron a refrendarnos el derecho de admision y permanencia, al cual replicamos que ese era un derecho que no estaba avalado en ninguna ley, y que si hablabamos de derechos implicitos, el de admision al pais era uno de los nuestros. Se fueron, claro, pero no derrotados.

Nos levantamos, fuimos a buscar unos tacos y unas quesadillas, y volvimos a la base. En ese entonces, yo habia dejado mi vida en Buenos Aires para instalarme en Cordoba, y el encantamiento del cambio de vida estaba dandole paso a la nostalgia, cuando el me preguntó:

¿Y vos que esperas de la vida?

Juro que senti el cachetazo. Senti como si me hubieran despertado de un sueño exasperantemente largo. Por un momento me pregunte si realmente estaba sentado en ese lugar, frotandome la panza horriblemente llena.

Nunca supe, nunca me dijeron, que tenia que esperar algo de la vida. De hecho, siempre fui a buscar, La pregunta esa me trajo la imagen de un kilo de manzanas verdes viniendo desde la verduleria hasta mi casa. No me parecio normal, esperar que la vida traiga algo.

Aunque por otro lado, si uno espera a la vera del Paraná, tarde o temprano nos traera algo, o alguien. Entonces, ¿como hay que plantearse y plantarse ante la vida?

Hay quienes piensan que la vida es un delivery de pizza, hay quienes piensan que la vida es un concepto vago que transcurre en un campo de batalla. Los primeros reciben, los segundos, luchan. Mi amigo es de la idea del delivery. Y eso tal vez, sea fomentado por el hecho de que sus padres se pasaron la vida haciendo un mango, que sus abuelos montaron una industria que hoy el maneja, o por el hecho de que cambia el auto cuando quiere y es dueño de un departamento grande como mi casa. De cualquier modo, el espera, y toma lo que se le presenta.

Yo nunca espere. Fui derecho a la lucha. A un trabajo mal pago, a una carrera universitaria auto-pagada sin terminar, a una casa alquilada con mil quilombos, a una vida sin demasiadas pretensiones, sin demasiadas posibilidades. Una vida de lucha. O segun el, una vida de mierda. Pero fui a buscarla. Recuerdo que en ese entonces tenia millones de expectativas, sueños sobre el futuro, ilusiones. Hoy subsisto como puedo.

Terminamos de comer, de tomar, de fumar y de pedirles los telefonos a las seis chicas ardientes que estaban cerca de nuestra mesa. Despues de otro entredicho con los coreanos, salimos a la avenida. Le conteste "Nada. No espero nada. Salgo a buscarlo". Fue ahi que me di vuelta y vi a tres coreanos con actitud amenazante, y salimos corriendo como llevados por el mismisimo Satanas. Supongo que se llamaban Won, Puh, Fang, Lee, o algo asi esos coreanos compadritos. La cuestion es que nos "acompañaron" hasta el cruce de la calle Ambrosetti con las vias del Sarmiento. Won, Pang, Jin, o como fuera que se llamasen, gritandonos cosas que nuca pudimos comprender.

Nos despedimos como siempre, puteandonos. Lo conozco desde los tres años. Siempre fue igual.
- Chau pelotudo
- Nos vemos hijo de puta
- Llamame mañana, forro
- Listo conchudo.


Pero al pasar los dias, la pregunta comenzo a resonar otra vez...

Despues de dormir durante 4 años, me desperté, haciendome la misma pregunta que lleva cuatro años sin respuesta para mi, una pregunta que el me disparo en aquel entonces.

Si bien la respuesta en un principio fue "nada", hoy me cuestiono cada dia la respuesta. Pero cuando estoy llegando a la conclusion, empiezo a pensar en cualquier cosa, que me saque de ahi.

No vaya a ser que el que vive equivocado sea yo.

viernes, 6 de junio de 2008

Vacaciones eran las de antes

Estoy de vacaciones. Si. Y como los viejos, me pongo a leer en pantuflas, en la tenue luz que entra por la ventana del living. Claro, lo que leo no son los diarios, ni "los miserables" de Victor Hugo. No. Leo los blogs que mas me gustan.

Triste. Porque las vacaciones antes se trataban de ir a pescar, de viajar, de hacer snowboard, de salir a bailar, de conocer, besar y amar a cuanta señorita se mostrara dispuesta.

Hoy leo en la oscuridad.
Hoy juego con mi pequeño hijo. Uno de los placeres mas grandes.
Hoy deberia estar pintando la casa, arreglando los mosaicos de la cocina, pero no tengo ganas. Me niego a perder mis vacaciones laburando como un perro, para llegar al ultimo dia de vacaciones y decir "necesito unas vacaciones"

De noche sueño que viajo, que me trinco señoritas a discrecion, que revoleo los baldes de pintura a la mierda... pero para eso, no necesito estar de vacaciones. Lo puedo hacer en cualquier momento.