Resultados del sondeo felino

Concluído el período de recolección de datos, procedemos a realizar un somero análisis de la información recaudada, con el fin de desinformarlos un poco mas de lo que hacen los medios periodísticos habituales.

Se recabó la información nominal de 56 ejemplares felinescos, de los cuales se desprende que, la población del gato conocido como siamés, esta aun por debajo de la media, y de la ojota también.



Si bien ostenta un nada despreciable porcentaje con respecto al gato "no siamés", es decir, agrupadas las demás razas bajo un genérico, podríamos afirmar que el siamés vendría a ser lo que la hinchada de boca juniors a la masa fulbolera argentina, sudamericana, y porque no, japonesa.


Esto se ve claramente tanto en la zona roja de Palermo, como en el siguiente gráfico:





El objetivo del estudio, era confirmar o reputear (perdón, refutar) la teoría pseudo conspiratoria, elaborada por mi, y cuestionada por Wakapinka. Esta enunciaba que :


"Todos los gatos siameses tienen nombres humanos, o apodos humanos, o nombres de la mitología"

Como podemos ver en el siguiente gráfico, esto no se cumple de manera definitoria, sino que se aplica al nada despreciable porcentaje del 87% de la población siamesa.



Es llamativo también, apreciar que un alto porcentaje de los siameses porta con hidalguía el apellido familiar. Tal vez pueda deberse a que la familia se sienta orgullosa de su mascota, mientras que en el caso de los gatos "rasca", tal vez el hecho de verlos regresar por las mañanas lastimados y oliendo a basura podrida, no anime a sus dueños de otorgarles el blasón familiar tan bien cuidado.



En el gráfico que sigue, se aprecia la manía de los dueños por apellidar a sus felinos. De los 21 catalogados con nombre humano, se aprecian los siguientes porcentuales:

No es poco un casi 40%. Calculando que los NS/NC tal vez pudieran aportar un caso positivo de apellido otorgado.



En el mundo gatuno en general, no es distinto el panorama.



El ser humano tiende a nombrar a sus mascotas con nombres humanos, y a considerar a los pequeños peludos de panzas suaves, como sus hijos por adopción. En el caso de los apellidos, el porcentaje es levemente mayor al mundo siamés.

Hasta aquí los resultados y una somera conclusión.

Los gatos suelen formar parte activa de la vida familiar. Nos rompen los sillones, nos afanan el asado de la parrilla, nos arañan a traición, nos usan de estufa, nos ignoran, nos aturden con sus cánticos sexuales, y nos sobornan con su pelaje suave. Por otro lado, nos brindan miles de satisfacciones, nos demuestran afecto, nos acompañan, aguantan nuestro malhumor, nuestros gases y nuestras manías.

Tal vez sea por eso, que la tendencia a nombrarlos y apellidarlos, sea una manera de empezar a incluirlos como miembro activo de la familia. Con su carácter definido, su humor cambiante, sus costumbres reprochables, son lo mas parecido a un ser humano. mejor dicho, al comportamiento de un ser humano.

El próximo estudio, como era de esperarse, será acerca de los perros.

Mas específicamente, de los perros de marcas reconocidas, y la manía de nombrarlos con nombres y diminutivos de los mismos.


Este informe es confidencial y después de leído debe ser aderezado con mayonesa y salsa barbacoa, y ser ingerido con monitor y todo.

Informe elaborado por el gato vagabundo/wakapinka para gatoenbiblioteca