No quiero decir mucho.
http://www.youtube.com/watch?v=hKRgLvmamUY&feature=related
Solo quiero decir que quiero vivir la vida como el. Tuve tambien la infancia feliz, los padres maravillosos... tengo todo lo que necesito para hacerlo.
¿Y vos?
miércoles, 30 de julio de 2008
Poeta de subte
No me alcanza con sentirte
y sentir que no te alcanzo
y caer en el remanso
de leer sin escribirte
No me alienta perseguirte
y quedarme sin aliento
exhalando como el viento
sin tener nada que decirte.
No te ando suplicando
ni me arrastro como bestia
tomate al menos la molestia
de comentar de vez en cuando.
y sentir que no te alcanzo
y caer en el remanso
de leer sin escribirte
No me alienta perseguirte
y quedarme sin aliento
exhalando como el viento
sin tener nada que decirte.
No te ando suplicando
ni me arrastro como bestia
tomate al menos la molestia
de comentar de vez en cuando.
martes, 29 de julio de 2008
Cagazo
Hace un tiempito, haciéndome el nene, me hice pelota una rodilla. En realidad, era cuestión de tiempo, ya que la misma había resistido choques en moto, patadas, mudanzas y un casamiento. La cuestión es que a mediados de marzo, la terminé de romper.
Y como era lógico, me van a operar. Hasta acá todo bien.
Al mismo tiempo, estuve haciendo (después de años de suspenderlo) todos los trámites para corregirme el tabique nasal. Lo tienen que correr un poco al centro, porque hoy está tan corrido a la izquierda, que en comparacion, Lenin parecería un burgués.
Otra operación en puerta. Hasta acá, todo bien también.
El tema es que hoy pasé a buscar las ordenes, confirmando la fecha y mi voluntad de operarme.
Y había una chica, se llama María Fernanda Tolosa. Le estaban haciendo firmar todos los papeles antes de ingresarla a cirugía. Algo tenia en la vesícula. La operaban esta mañana.
Y yo, viviendo todo eso, estaba esperando a que me atiendan despues de ella.
Pero lo mas tétrico, era que la chica que le tomaba todos los datos, no cesaba de decirle "María Fernanda tal cosa, María Fernanda tal otra"... "ahora vienen las chicas a buscarte". Y esa frase me sono a "ya llega la muerte a buscarte. Relajate"
Maria Fernanda hizo una firma enorme, que decía "Fernanda Tolosa" No usa el María. Yo lo noté, y la secretaria no, demostrando así un automatismo y una frialdad preocupantes, ocultas tras una brillante actuación de calidez humana. Pero yo lo noté. Y Fernanda también.
Y entonces, llegó quién la venía a buscar. Dejó a una madre preocupada, indicándole el camino hacia el bar, con la recomendación de que se vaya a tomar un café. Como si uno pudiera tragar algo cuando estan abriendo a tu hijo, sin saber en que va a resultar...
Fernanda entró sola. La llamaron a pasar por la puerta como quién entra al cielo y se despide de su vida terrenal. Como entraban los faraones a la pirámide para ser momificados. No hay vuelta atrás. Sin familiares.
Cuando me atienden a mí, me dan todas las indicaciones, y me dicen "cuando entres, entras solo, no te pueden acompañar familiares", y en un intento de demostración de valentía y bravura, dije "No hay problema, no hay nadie que me acompañe. Estoy solo".
Y me dí cuenta de algo: es verdad. Mi familia está en Buenos Aires. Toda.
Y entonces, comprendí que estoy enfrentando cirugías, separadas entre sí por un mes, y solo. Y no me puedo sacar la imagen de Fernanda llorando por dentro, firmando papeles para ser operada. Y para poner su vida en manos de vaya a saber quién. Y me ví a mí, reflejado en sus ojos rojos y vacíos, en su respiración forzada, en su fingida calma... me vi a mi, con 15 dias de anticipación.
Y sin poder evitarlo, me entró el cagazo. De la anestesia, de si el médico tuvo un mal día, o si está cansado de su profesión, de si yo respondo bien, de si alguien me acompaña, de si... de cualquier cosa.
Como aquella vez, que me preparaba para salir hacia un posible debut sexual, y me temblaban las piernas, las manos, y el corazón golpeaba fuerte, estoy encarando el debut quirúrgico. Ese que siempre temí desde chico. Ese que siempre juré evitar. Y ahora, estoy yendo solo, sin mas presión que la mía.
No puedo evitarlo. Quiero vivir para siempre, pero estoy empezando a aceptar que no soy inmortal.
Y como era lógico, me van a operar. Hasta acá todo bien.
Al mismo tiempo, estuve haciendo (después de años de suspenderlo) todos los trámites para corregirme el tabique nasal. Lo tienen que correr un poco al centro, porque hoy está tan corrido a la izquierda, que en comparacion, Lenin parecería un burgués.
Otra operación en puerta. Hasta acá, todo bien también.
El tema es que hoy pasé a buscar las ordenes, confirmando la fecha y mi voluntad de operarme.
Y había una chica, se llama María Fernanda Tolosa. Le estaban haciendo firmar todos los papeles antes de ingresarla a cirugía. Algo tenia en la vesícula. La operaban esta mañana.
Y yo, viviendo todo eso, estaba esperando a que me atiendan despues de ella.
Pero lo mas tétrico, era que la chica que le tomaba todos los datos, no cesaba de decirle "María Fernanda tal cosa, María Fernanda tal otra"... "ahora vienen las chicas a buscarte". Y esa frase me sono a "ya llega la muerte a buscarte. Relajate"
Maria Fernanda hizo una firma enorme, que decía "Fernanda Tolosa" No usa el María. Yo lo noté, y la secretaria no, demostrando así un automatismo y una frialdad preocupantes, ocultas tras una brillante actuación de calidez humana. Pero yo lo noté. Y Fernanda también.
Y entonces, llegó quién la venía a buscar. Dejó a una madre preocupada, indicándole el camino hacia el bar, con la recomendación de que se vaya a tomar un café. Como si uno pudiera tragar algo cuando estan abriendo a tu hijo, sin saber en que va a resultar...
Fernanda entró sola. La llamaron a pasar por la puerta como quién entra al cielo y se despide de su vida terrenal. Como entraban los faraones a la pirámide para ser momificados. No hay vuelta atrás. Sin familiares.
Cuando me atienden a mí, me dan todas las indicaciones, y me dicen "cuando entres, entras solo, no te pueden acompañar familiares", y en un intento de demostración de valentía y bravura, dije "No hay problema, no hay nadie que me acompañe. Estoy solo".
Y me dí cuenta de algo: es verdad. Mi familia está en Buenos Aires. Toda.
Y entonces, comprendí que estoy enfrentando cirugías, separadas entre sí por un mes, y solo. Y no me puedo sacar la imagen de Fernanda llorando por dentro, firmando papeles para ser operada. Y para poner su vida en manos de vaya a saber quién. Y me ví a mí, reflejado en sus ojos rojos y vacíos, en su respiración forzada, en su fingida calma... me vi a mi, con 15 dias de anticipación.
Y sin poder evitarlo, me entró el cagazo. De la anestesia, de si el médico tuvo un mal día, o si está cansado de su profesión, de si yo respondo bien, de si alguien me acompaña, de si... de cualquier cosa.
Como aquella vez, que me preparaba para salir hacia un posible debut sexual, y me temblaban las piernas, las manos, y el corazón golpeaba fuerte, estoy encarando el debut quirúrgico. Ese que siempre temí desde chico. Ese que siempre juré evitar. Y ahora, estoy yendo solo, sin mas presión que la mía.
No puedo evitarlo. Quiero vivir para siempre, pero estoy empezando a aceptar que no soy inmortal.
lunes, 28 de julio de 2008
Muestra Gratis II
En el capitulo anterior.....
...
- Ha pasado mucho tiempo desde que te vi. Naciste un día de sol, como si fuese el preludio de lo que iba a venir de tu mano...
- No creo que sea tan importante, Su Ilustrísima....
- No... no me llames así... para los demás es aceptable, pero no para vos.
- No encuentro otra forma de llamarlo... perdón... llamarte.
- Carlos. Y si eso te parece demasiado intimo, Juan Pablo III esta bien igual.
- Señor, vengo a discutir asuntos mas importantes, sin ofenderlo.
- Martín... La iglesia esta empezando a inquietarse con tus métodos. No discutimos los resultados, no, pero los métodos...
- Entiendo.
- Se han convertido en algo, como decirlo, tal vez, espectaculares.
- ¿Lo del juez?
- Si. Puntualmente. Esta bien la idea de justicia, pero no se si esta bien ser tan explicito, frente a las cámaras de televisión. El video esta circulando en toda la red.
- Quizás exageré un poco.
- Quizás esta triunfando tu costado artístico de la muerte. Pero eso no era lo que habíamos planeado.
- Su Ilus... Carlos... la presión es demasiada. Y trato de aprovechar el tiempo. Estoy manejando todo un continente. No es fácil para un solo hombre... o lo que sea que yo fuere.
- Tranquilo Martín. Estamos en eso. Hay muchos mas, solo que hoy están creciendo. Estamos formándolos. Es solo una cuestión de tiempo. Igualmente, sos un equilibrante. Un balance. Nada mas. No pretendemos que los problemas de raiz de una civilización se solucionen en unos años. Deberias tomarte con mas calma las cosas.
Martín agacho su cabeza, beso la mano del sumo pontífice y le dijo mirándolo a los ojos:
- Después de todo, solo somos humanos.
- Eso es cierto en mi caso Martín. Y lo acepto así. Deberías hacer lo mismo.
- Si. Debería aceptar mi naturaleza, así como acepto mi misión.
- Eso es. Sin duda te estas convirtiendo en un ser de grandeza.
- A fuerza de sangre...
- A fuerza de sangre... es cierto.
- Nos veremos pronto, ¿no es así?
El clérigo asintió con la cabeza, mientras en el otro extremo del planeta detonaban un dispositivo nuclear en un poblado de Nueva Zelanda. Parecía una cruel broma del destino. Aquella tarde, un vuelo privado partió desde el Vaticano a Washington.
Martín estaba en el, y tenia una nueva misión.
...
- Ha pasado mucho tiempo desde que te vi. Naciste un día de sol, como si fuese el preludio de lo que iba a venir de tu mano...
- No creo que sea tan importante, Su Ilustrísima....
- No... no me llames así... para los demás es aceptable, pero no para vos.
- No encuentro otra forma de llamarlo... perdón... llamarte.
- Carlos. Y si eso te parece demasiado intimo, Juan Pablo III esta bien igual.
- Señor, vengo a discutir asuntos mas importantes, sin ofenderlo.
- Martín... La iglesia esta empezando a inquietarse con tus métodos. No discutimos los resultados, no, pero los métodos...
- Entiendo.
- Se han convertido en algo, como decirlo, tal vez, espectaculares.
- ¿Lo del juez?
- Si. Puntualmente. Esta bien la idea de justicia, pero no se si esta bien ser tan explicito, frente a las cámaras de televisión. El video esta circulando en toda la red.
- Quizás exageré un poco.
- Quizás esta triunfando tu costado artístico de la muerte. Pero eso no era lo que habíamos planeado.
- Su Ilus... Carlos... la presión es demasiada. Y trato de aprovechar el tiempo. Estoy manejando todo un continente. No es fácil para un solo hombre... o lo que sea que yo fuere.
- Tranquilo Martín. Estamos en eso. Hay muchos mas, solo que hoy están creciendo. Estamos formándolos. Es solo una cuestión de tiempo. Igualmente, sos un equilibrante. Un balance. Nada mas. No pretendemos que los problemas de raiz de una civilización se solucionen en unos años. Deberias tomarte con mas calma las cosas.
Martín agacho su cabeza, beso la mano del sumo pontífice y le dijo mirándolo a los ojos:
- Después de todo, solo somos humanos.
- Eso es cierto en mi caso Martín. Y lo acepto así. Deberías hacer lo mismo.
- Si. Debería aceptar mi naturaleza, así como acepto mi misión.
- Eso es. Sin duda te estas convirtiendo en un ser de grandeza.
- A fuerza de sangre...
- A fuerza de sangre... es cierto.
- Nos veremos pronto, ¿no es así?
El clérigo asintió con la cabeza, mientras en el otro extremo del planeta detonaban un dispositivo nuclear en un poblado de Nueva Zelanda. Parecía una cruel broma del destino. Aquella tarde, un vuelo privado partió desde el Vaticano a Washington.
Martín estaba en el, y tenia una nueva misión.
sábado, 26 de julio de 2008
Estoy sin palabras
Nunca antes me habían dedicado una entrada. Y menos aun, una así, tan escueta y a la vez tan llena de contenido, como la que dejó Barbarita en su blog hoy.
No solo estoy sin palabras. Estoy agradecido. Porque llegó en el momento justo. Mas justo, imposible. Y yo tenía totalmente asumido que con Barbara no había una conexión al menos notoria, pero lo que pasó hoy, me dejó mas asombrado y confundido que Robert Plant. No lo esperaba de ella.
Yo no se si Bárbara lee esto. Pero no importa. Ella me hizo feliz hoy con una foto y 10 palabras.
Me hizo creer de nuevo, con palitos, piedritas, un poco de agua y unas palabras mágicas.
Me voy a dormir el sueño de los viernes. Pero esta vez, gracias a ella, me voy a la cama con una enorme sonrisa.
No solo estoy sin palabras. Estoy agradecido. Porque llegó en el momento justo. Mas justo, imposible. Y yo tenía totalmente asumido que con Barbara no había una conexión al menos notoria, pero lo que pasó hoy, me dejó mas asombrado y confundido que Robert Plant. No lo esperaba de ella.
Yo no se si Bárbara lee esto. Pero no importa. Ella me hizo feliz hoy con una foto y 10 palabras.
Me hizo creer de nuevo, con palitos, piedritas, un poco de agua y unas palabras mágicas.
Me voy a dormir el sueño de los viernes. Pero esta vez, gracias a ella, me voy a la cama con una enorme sonrisa.
jueves, 24 de julio de 2008
Laura III
Ayer la vi de nuevo. Me vendió unos alfajorcitos de maicena que tenian varios dias en la exhibidora, y eso fue la pauta de que no siente el mas minimo aprecio por mi. Ademas, la ví tan fea...
Fue bastante decepcionante la excursion a la panaderia.
Ahora, a esperar que aparezca la proxima. Puede llevar años. O minutos.
El amor es caprichoso... sobre todo si es clandestino.
Fue bastante decepcionante la excursion a la panaderia.
Ahora, a esperar que aparezca la proxima. Puede llevar años. O minutos.
El amor es caprichoso... sobre todo si es clandestino.
martes, 22 de julio de 2008
Miau !
¡Oh, pero que extravagancia mas util!
Sobre todo cuando levantas buenos gatos y despues los tenes que bajar rapido del auto.
Lo que no aclaran es, si te quedas sin bateria... ¿como rayos (si, en realidad se dice carajo) salis del auto?.
Para ver : http://www.disappearing-car-door.com/
Sobre todo cuando levantas buenos gatos y despues los tenes que bajar rapido del auto.
Lo que no aclaran es, si te quedas sin bateria... ¿como rayos (si, en realidad se dice carajo) salis del auto?.
Para ver : http://www.disappearing-car-door.com/
La salida de Leopoldo Lugones
Hoy recorde a Leopoldo Lugones. Supongo que fue por estas malditas ganas de suicidarme que me entran cada tanto. La salida de Lugones (no, la de la cancha de river no) es un recurrente en mi cabeza.
Igual, no me preocupa. Ya estuve ahi tantas veces, y volvi, que no me asusta.
Estuve en el infierno, me hice unos chorizos y unas costillitas a las brasas, y despues de comer volvi a la tierra.
Conozco el camino, conozco el cielo tambien, pero todos sabemos que es mas dificil mantenerse en el aire que bajar en la tierra.
Pero siempre estan ellos, la literatura de Horacio Quiroga, de Leopoldo Lugones, la musica de Radiohead, o Nick Drake entre tantos...
Tal vez ya sea hora de solucionar esta vida de una vez por todas.
Igual, no me preocupa. Ya estuve ahi tantas veces, y volvi, que no me asusta.
Estuve en el infierno, me hice unos chorizos y unas costillitas a las brasas, y despues de comer volvi a la tierra.
Conozco el camino, conozco el cielo tambien, pero todos sabemos que es mas dificil mantenerse en el aire que bajar en la tierra.
Pero siempre estan ellos, la literatura de Horacio Quiroga, de Leopoldo Lugones, la musica de Radiohead, o Nick Drake entre tantos...
Tal vez ya sea hora de solucionar esta vida de una vez por todas.
jueves, 17 de julio de 2008
Muestra gratis
... "zinnnng"... apenas se oyó el sonido de la hoja del cuchillo, muy suave, entre el griterío de los periodistas preguntando. El cuello se abrió al cielo, y las escasas gotas de sangre que aparecieron, se transformaron en esferas carmesí, que por un momento, se suspendieron en el aire ante los ojos incrédulos de cientos de buitres.
2 segundos después, muchos de ellos se encontraban salpicados de la sangre del juez mas corrupto en la historia penal de la nación. En las escaleras de los tribunales, yacía el cuerpo aun caliente del Dr Sanchez Aravena, y con el se terminaría una prolífica (y bien paga)puerta a la libertad de miles de asesinos, violadores, y ladrones de autos (estos eran sus preferidos).
Y mientras los que sostenían micrófonos huyeron sin mirar atrás, los camarógrafos y fotógrafos cumplieron con su tarea de alimentar de sangre a los millones de televidentes. Nadie pudo ver en realidad al asesino. Se escabulló tan rápidamente entre la multitud, que podría haber sido cualquiera de los periodistas presentes.
Se fue caminando con paso firme, tranquilo, por la avenida mas transitada. Cuando llegó a la esquina, le sacó el capuchón al cuchillo apenas ensangrentado, y la arrojó en un cesto de basura, mientras esperaba la luz de cruce en el semáforo. Inmediatamente lo guardó entre la ropa, y bajo a la estación de subte.
Durante ese día, los peatones mas observadores se asombraban, al ver entre la basura del cesto un micrófono del mayor canal de noticias.
El tiempo apremiaba, el subte asfixiaba, y el ya se estaba dirigiendo a su próxima víctima. Sin expresión perceptible, su rostro reflejaba la temperatura de su sangre. A el, no le importaba si los pasajeros debían sufrir esa miseria para llegar a sus trabajos. El ya estaba trabajando.
Una anciana que necesitaba bajar, iba abriéndose paso dificultosamente entre la muchedumbre. Cuando paso por delante de el, no pudo evitar pisarlo. El, a diferencia de los demás, le ofreció su brazo, y comenzó a abrirse paso hasta la puerta.
- Gracias joven - le dijo
- Por favor señora, es lo que cualquiera haría...
Aprovechó el haber bajado dos estaciones antes del barrio de los coreanos, para caminar un poco, oliendo el aire rancio de la ciudad. Entro al fétido baño, se instaló en uno de los cubículos, y cerró la puerta.
Y se cercioró que la "Dessert Eagle" tuviera balas y funcionara correctamente...
2 segundos después, muchos de ellos se encontraban salpicados de la sangre del juez mas corrupto en la historia penal de la nación. En las escaleras de los tribunales, yacía el cuerpo aun caliente del Dr Sanchez Aravena, y con el se terminaría una prolífica (y bien paga)puerta a la libertad de miles de asesinos, violadores, y ladrones de autos (estos eran sus preferidos).
Y mientras los que sostenían micrófonos huyeron sin mirar atrás, los camarógrafos y fotógrafos cumplieron con su tarea de alimentar de sangre a los millones de televidentes. Nadie pudo ver en realidad al asesino. Se escabulló tan rápidamente entre la multitud, que podría haber sido cualquiera de los periodistas presentes.
Se fue caminando con paso firme, tranquilo, por la avenida mas transitada. Cuando llegó a la esquina, le sacó el capuchón al cuchillo apenas ensangrentado, y la arrojó en un cesto de basura, mientras esperaba la luz de cruce en el semáforo. Inmediatamente lo guardó entre la ropa, y bajo a la estación de subte.
Durante ese día, los peatones mas observadores se asombraban, al ver entre la basura del cesto un micrófono del mayor canal de noticias.
El tiempo apremiaba, el subte asfixiaba, y el ya se estaba dirigiendo a su próxima víctima. Sin expresión perceptible, su rostro reflejaba la temperatura de su sangre. A el, no le importaba si los pasajeros debían sufrir esa miseria para llegar a sus trabajos. El ya estaba trabajando.
Una anciana que necesitaba bajar, iba abriéndose paso dificultosamente entre la muchedumbre. Cuando paso por delante de el, no pudo evitar pisarlo. El, a diferencia de los demás, le ofreció su brazo, y comenzó a abrirse paso hasta la puerta.
- Gracias joven - le dijo
- Por favor señora, es lo que cualquiera haría...
Aprovechó el haber bajado dos estaciones antes del barrio de los coreanos, para caminar un poco, oliendo el aire rancio de la ciudad. Entro al fétido baño, se instaló en uno de los cubículos, y cerró la puerta.
Y se cercioró que la "Dessert Eagle" tuviera balas y funcionara correctamente...
martes, 15 de julio de 2008
Laura II
Claro. Ayer me di cuenta. Las Lauras me arruinan la vida cada vez que aparecen.
Indefectiblemente me enamoro de toda mujer que se llame Laura. ¿como me di cuenta ayer?, fácil.
Haciendo números.
Cuando empecé a ir al jardín de infantes, conocí a una Laura, rulos grandes, ojazos verdes, colombiana ella. Laura Fernandez. Hasta la mitad de tercer grado, fui con ella, doble escolaridad, lo que equivaldría a haber hecho toda la primaria juntos.
Nunca supo de mi amor por ella, y creo que ese primer romance fallido, marcaría para siempre mis relaciones con las Lauras.
A los 19 años me enamoré de otra Laura. Y con ella salí 2 años, y también hizo mi vida miserable.
Terminó mas que mal, con interdictos judiciales, amenazas telefónicas e incontables persecuciones y seguimientos, que tuve que soportar cual granadero con temple de mármol.
Hace un año conocía a Laura, mi compañera de trabajo. Fueron épocas difíciles para mi y ella me había encantado con sus ojos (¡oh!) verdes maravillosos. Como la primera, Laura Fernandez, nunca pasó nada, pero la diferencia es que esta SI se enteró de mis sentimientos, pero no quiso hacerse cargo. Como era de esperarse, terminó con mis expectativas también, pero abruptamente.
Y uno dice "bueno, son coincidencias". Si. Y no. Porque la vida demostró una vez mas su ironía.
Porque en cuanto se fue ella, apareció otra...
Laura, la panadera.
Antes de conocerla, empecé a tramar la historia de Bruno. Irma la rotisera, hermosa, treinta y pico, y una figura tremenda. Y Bruno, un soñador calentón, que la ve a diario y no puede evitar desearla.
Parece una descripción perfecta cambiando solo los nombres de los personajes. Hoy me veo en el mismo cuento, como una predicción futurista. Solo que, como no podía ser la excepción, esta Laura pasara por mi vida sin notarlo y por mi corazón sin saberlo.
Al menos, con ella, estuvimos saltando juntos en una cama elástica, jugando y riendo como chicos.
Como es sabido, esta Laura tambien pasará. Y casi estoy ansioso por conocer a la próxima Laura.
Ahhh, y hablando de historias, estén alertas, porque se viene una nueva historia. Y va a ser controversial, y de un tinte policial, va a haber suspenso, acción, crímenes, giros inesperados y pochoclo gratis.
Se viene la historia que va a marcar historia...
Se viene "El Ángel Asesino"
Indefectiblemente me enamoro de toda mujer que se llame Laura. ¿como me di cuenta ayer?, fácil.
Haciendo números.
Cuando empecé a ir al jardín de infantes, conocí a una Laura, rulos grandes, ojazos verdes, colombiana ella. Laura Fernandez. Hasta la mitad de tercer grado, fui con ella, doble escolaridad, lo que equivaldría a haber hecho toda la primaria juntos.
Nunca supo de mi amor por ella, y creo que ese primer romance fallido, marcaría para siempre mis relaciones con las Lauras.
A los 19 años me enamoré de otra Laura. Y con ella salí 2 años, y también hizo mi vida miserable.
Terminó mas que mal, con interdictos judiciales, amenazas telefónicas e incontables persecuciones y seguimientos, que tuve que soportar cual granadero con temple de mármol.
Hace un año conocía a Laura, mi compañera de trabajo. Fueron épocas difíciles para mi y ella me había encantado con sus ojos (¡oh!) verdes maravillosos. Como la primera, Laura Fernandez, nunca pasó nada, pero la diferencia es que esta SI se enteró de mis sentimientos, pero no quiso hacerse cargo. Como era de esperarse, terminó con mis expectativas también, pero abruptamente.
Y uno dice "bueno, son coincidencias". Si. Y no. Porque la vida demostró una vez mas su ironía.
Porque en cuanto se fue ella, apareció otra...
Laura, la panadera.
Antes de conocerla, empecé a tramar la historia de Bruno. Irma la rotisera, hermosa, treinta y pico, y una figura tremenda. Y Bruno, un soñador calentón, que la ve a diario y no puede evitar desearla.
Parece una descripción perfecta cambiando solo los nombres de los personajes. Hoy me veo en el mismo cuento, como una predicción futurista. Solo que, como no podía ser la excepción, esta Laura pasara por mi vida sin notarlo y por mi corazón sin saberlo.
Al menos, con ella, estuvimos saltando juntos en una cama elástica, jugando y riendo como chicos.
Como es sabido, esta Laura tambien pasará. Y casi estoy ansioso por conocer a la próxima Laura.
Ahhh, y hablando de historias, estén alertas, porque se viene una nueva historia. Y va a ser controversial, y de un tinte policial, va a haber suspenso, acción, crímenes, giros inesperados y pochoclo gratis.
Se viene la historia que va a marcar historia...
Se viene "El Ángel Asesino"
viernes, 11 de julio de 2008
Recuerdos
(Ilustran esta entrada : The Beatles - For No One / Peteco Carabajal - Perfume de Carnaval)
Hoy leía a Penelope. Y volvía a vivir una historia lejana. No pasada, porque las historias como esas, nunca pasan. Las historias como esas simplemente se adormecen para reactivarse como el herpes, ante un recuerdo, un aroma, una imagen, un sabor.
Se llamaba Celeste. Vivía en Resistencia, Chaco. Tenía una hija, Azul, un sol. Celeste tenía unos ojos maravillosos, y tenía un amor eterno, y un día sin muchas explicaciones, decidió dejarlo.
Teníamos momentos inolvidables, que se transformaron en recuerdos maravillosos.
Ella se casó, y tuvo dos hijos mas. Hoy vive en Paraná. Vive feliz, porque cree haber encontrado su misión en la vida. Y nunca se dió cuenta de que su misión en la vida era dejarse llevar de mi mano hacia la felicidad.
Cierta vez lei en una pared, en Villa Devoto :
Celeste eligió no amar a quien la amó mas que nadie.
Ese amor eterno, como era de esperarse, se adormeció. Claro, hoy yo estoy viviendo otra realidad. Pero por dentro siempre espero que me llame. Lo hizo varias veces, pero nunca para pedirme que vuelva a adormecerme en sus brazos y en sus besos.
Y así es este juego. Siempre hay un amor inolvidable, que aparece en los momentos mas inadecuados. Creo que estoy construido de amores imposibles.
... ¡Ay!...Perfume de carnaval
ya nunca me he´i de olvidar
su piel llevaba el aroma
de flor y tierra mojada
bellos recuerdos que siempre
los guardo dentro del alma.
Hoy leía a Penelope. Y volvía a vivir una historia lejana. No pasada, porque las historias como esas, nunca pasan. Las historias como esas simplemente se adormecen para reactivarse como el herpes, ante un recuerdo, un aroma, una imagen, un sabor.
Se llamaba Celeste. Vivía en Resistencia, Chaco. Tenía una hija, Azul, un sol. Celeste tenía unos ojos maravillosos, y tenía un amor eterno, y un día sin muchas explicaciones, decidió dejarlo.
Teníamos momentos inolvidables, que se transformaron en recuerdos maravillosos.
Ella se casó, y tuvo dos hijos mas. Hoy vive en Paraná. Vive feliz, porque cree haber encontrado su misión en la vida. Y nunca se dió cuenta de que su misión en la vida era dejarse llevar de mi mano hacia la felicidad.
Cierta vez lei en una pared, en Villa Devoto :
"Amarás a quien no te ama
por no amar a quien te ama"
Celeste eligió no amar a quien la amó mas que nadie.
Ese amor eterno, como era de esperarse, se adormeció. Claro, hoy yo estoy viviendo otra realidad. Pero por dentro siempre espero que me llame. Lo hizo varias veces, pero nunca para pedirme que vuelva a adormecerme en sus brazos y en sus besos.
Y así es este juego. Siempre hay un amor inolvidable, que aparece en los momentos mas inadecuados. Creo que estoy construido de amores imposibles.
... ¡Ay!...Perfume de carnaval
ya nunca me he´i de olvidar
su piel llevaba el aroma
de flor y tierra mojada
bellos recuerdos que siempre
los guardo dentro del alma.
jueves, 10 de julio de 2008
Indignacion
Estaba leyendo hoy esta nota en La voz del interior. Resulta que ahora aparece esta boluda de Paola Kullock, diciendo que es experta en sexo, y que nos da las postas acerca de lo que hay que hacer y lo que no a la hora de frotar partes sensibles.
Como todo soberbio e inútil, dice generalidades. Por empezar, es tan, pero tan imbécil, que se presenta a ella misma como "experta en sexo" (¿quién te dió el título?).
Una vez cometida esta idiotez, no para de asestarnos consejos de lo mas pelotudos acerca de las relaciones sexuales. Y uno de sus consejos, es el siguiente :
Para las mujeres : No fingir orgasmos. "No les gusta (a los hombres), pero tampoco se dan cuenta si fue de verdad o fingido".
Decime una cosa, hermana de actriz de novela, devenida en atorranta con titulo nobiliario :
¿QUIEN CARAJO TE DIJO QUE NO NOS DAMOS CUENTA CUANDO TIENEN UN ORGASMO? ¿QUIEN FUE EL BOLUDO QUE TE TRINCASTE, QUE NO ESTUVO ATENTO A ESE DETALLE?
Si te andas trincando gatos, o boluditos de la tele, fijate. Trata de encontrar un hombre de verdad así podes revalidar (o no, lo veo muy difícil) tu título.
Como todo soberbio e inútil, dice generalidades. Por empezar, es tan, pero tan imbécil, que se presenta a ella misma como "experta en sexo" (¿quién te dió el título?).
Una vez cometida esta idiotez, no para de asestarnos consejos de lo mas pelotudos acerca de las relaciones sexuales. Y uno de sus consejos, es el siguiente :
Para las mujeres : No fingir orgasmos. "No les gusta (a los hombres), pero tampoco se dan cuenta si fue de verdad o fingido".
Decime una cosa, hermana de actriz de novela, devenida en atorranta con titulo nobiliario :
¿QUIEN CARAJO TE DIJO QUE NO NOS DAMOS CUENTA CUANDO TIENEN UN ORGASMO? ¿QUIEN FUE EL BOLUDO QUE TE TRINCASTE, QUE NO ESTUVO ATENTO A ESE DETALLE?
Si te andas trincando gatos, o boluditos de la tele, fijate. Trata de encontrar un hombre de verdad así podes revalidar (o no, lo veo muy difícil) tu título.
.
.
.
.
.
.
.
Repasamos sus otros consejos y comentamos:
.
.
.
.
.
Durar demasiado, o durar muy poco. "La precocidad no sirve, pero tampoco se trata de establecer un nuevo record en el Guiness. Un acto sexual de una hora no nos da más placer a nosotras, en todo caso nos irrita". (bien)
Desconocer la anatomía femenina. "El ombligo no es el camino al clítoris, así que sería bueno que no insistan metiendo el dedo en el pupo de las chicas. Duele y no es para nada erótico".
(¿pero que clase de pelotudo se acuesta con vos nena?)
Hablar de otras mujeres. "Ni hablar de confundirse el nombre, que podría ser considerado una especie de suicidio sexual. Pero, por ejemplo, que nos cuenten lo que hacían o hacen con otras parejas sexuales, no es necesario y no nos interesa que nos hablen de otra".
(bien, aunque si te gusta tu pareja, te importa muy poco)
Poner una porno en el DVD en la primera cita. "Es típico: la primera vez que nos llevan al hotel ponen una peli. Bueno, no nos gusta. Por ahí más adelante sí, pero no en la primera vez que tienen sexo con nosotras".
(¡no es típico! Y además, en caso de que al tipo le guste ver una película, usualmente PREGUNTA : "¿te gustaría que ponga esta película?")
Dejarse las medias puestas. "El segundo mandamiento para hombres dice: Sacate las medias antes que el pantalón. El primero es: No uses slip. Está claro que la combinación de anatomía masculina, slip y medias (todo a la vista) es algo así como un pecado".
(Bueh, es evidente que te acostas con un paciente siquiatrico. ¿No uses slip? o sea que, según la nena boba, mas de la mitad de la población masculina esta inhabilitada para tener sexo. Menos mal que uso boxers)
No hacerse cargo. "Si el caballero sufre un problema de erección, odiamos que nos digan ‘es la primera vez que me pasa’, tanto o más que busquen echarnos la culpa del contratiempo. Lo mejor que pueden hacer es aceptar que les pasó". (¿te echaron la culpa por eso alguna vez?... ¿porque sera que no me extraña?)
Economizar. "Si la llevás a un hotel por primera vez, no elijas la habitación más barata, tampoco hace falta que sea la más cara, pero intentá hacerla sentir importante".
(tal vez se trate de un problema económico real. Tal vez el tipo tiene que arreglar el fiat 600 para poder seguir laburando. Lo que es seguro es que no vamos a escatimar esfuerzos en deslumbrarlas)
Preguntar demasiado. "Pasarse toda la relación sexual diciendo ‘¿Te gusta? ¿Te gusta? ¿La estás pasando bien?’. No hace falta gastar esa energía en eso, más vale seguí haciendo lo que estás haciendo, que yo te voy a decir si no me gusta".
(creo que ni hace falta acotar acá. Si alguien se la pasa preguntando si te gusta, tal vez sea que a el NO LE GUSTA)
Apurarse demasiado en la previa. "Si la vas a desvestir, hacelo con cuidado, tomate tu tiempo.
(Si te arranca la ropa, o es violación, o es un asalto)
Otro detalle a tener en cuenta: si vas al baño, cerrá la puerta. Sobre todo al principio de la relación, es un pecado imperdonable. Después, con el tiempo, con más confianza, es distinto. Pero no necesitamos ese nivel de intimidad el primer día".
(¿acaso alguno de tus partenaires salio del baño prendiendo fósforos y diciendo : "¡mamaaaa! ¡esas milanesas a la napolitana me mataron!"?...
Desconocer la anatomía femenina. "El ombligo no es el camino al clítoris, así que sería bueno que no insistan metiendo el dedo en el pupo de las chicas. Duele y no es para nada erótico".
(¿pero que clase de pelotudo se acuesta con vos nena?)
Hablar de otras mujeres. "Ni hablar de confundirse el nombre, que podría ser considerado una especie de suicidio sexual. Pero, por ejemplo, que nos cuenten lo que hacían o hacen con otras parejas sexuales, no es necesario y no nos interesa que nos hablen de otra".
(bien, aunque si te gusta tu pareja, te importa muy poco)
Poner una porno en el DVD en la primera cita. "Es típico: la primera vez que nos llevan al hotel ponen una peli. Bueno, no nos gusta. Por ahí más adelante sí, pero no en la primera vez que tienen sexo con nosotras".
(¡no es típico! Y además, en caso de que al tipo le guste ver una película, usualmente PREGUNTA : "¿te gustaría que ponga esta película?")
Dejarse las medias puestas. "El segundo mandamiento para hombres dice: Sacate las medias antes que el pantalón. El primero es: No uses slip. Está claro que la combinación de anatomía masculina, slip y medias (todo a la vista) es algo así como un pecado".
(Bueh, es evidente que te acostas con un paciente siquiatrico. ¿No uses slip? o sea que, según la nena boba, mas de la mitad de la población masculina esta inhabilitada para tener sexo. Menos mal que uso boxers)
No hacerse cargo. "Si el caballero sufre un problema de erección, odiamos que nos digan ‘es la primera vez que me pasa’, tanto o más que busquen echarnos la culpa del contratiempo. Lo mejor que pueden hacer es aceptar que les pasó". (¿te echaron la culpa por eso alguna vez?... ¿porque sera que no me extraña?)
Economizar. "Si la llevás a un hotel por primera vez, no elijas la habitación más barata, tampoco hace falta que sea la más cara, pero intentá hacerla sentir importante".
(tal vez se trate de un problema económico real. Tal vez el tipo tiene que arreglar el fiat 600 para poder seguir laburando. Lo que es seguro es que no vamos a escatimar esfuerzos en deslumbrarlas)
Preguntar demasiado. "Pasarse toda la relación sexual diciendo ‘¿Te gusta? ¿Te gusta? ¿La estás pasando bien?’. No hace falta gastar esa energía en eso, más vale seguí haciendo lo que estás haciendo, que yo te voy a decir si no me gusta".
(creo que ni hace falta acotar acá. Si alguien se la pasa preguntando si te gusta, tal vez sea que a el NO LE GUSTA)
Apurarse demasiado en la previa. "Si la vas a desvestir, hacelo con cuidado, tomate tu tiempo.
(Si te arranca la ropa, o es violación, o es un asalto)
Otro detalle a tener en cuenta: si vas al baño, cerrá la puerta. Sobre todo al principio de la relación, es un pecado imperdonable. Después, con el tiempo, con más confianza, es distinto. Pero no necesitamos ese nivel de intimidad el primer día".
(¿acaso alguno de tus partenaires salio del baño prendiendo fósforos y diciendo : "¡mamaaaa! ¡esas milanesas a la napolitana me mataron!"?...
E así... Cualquiera tiene una escuela en este país...)
Dejar marcas en la piel. "A menos que pidamos específicamente que nos dejen marcas, no lo hagan, porque no nos gusta".
(eso es mentira. las marcas (ocultas, por supuesto) son parte de las relaciones intensas. Lo que tenes que evitar es dejar el cuello como si hubieran intentado ahorcarte con una soga de barco)
No es una actriz porno. "Uno de los efectos negativos de la difusión a través de Intenet o DVD hacen que ellos crean que nos gusta que nos den chirlos, que nos maltraten o que nos hagan doler. En la mayoría de los casos, no nos gusta".
(a menos que sea un pedido explicito, no creo que nadie de por sentado que a alguien le guste que le peguen. Excepto vos, claro)
Para ellas, por supuesto, también hay algunas cuestiones que –según Kullock– deben grabarse a fuego con un "No debo" bien grande a continuación.
Perfumarse demasiado o descuidar algunos aspectos de la higiene personal. "Ni un extremo ni el otro, pero lo que sí es seguro es que ellos son mucho menos tolerantes con los olores corporales".
(¿¿¿quien te dijo esa idiotez??? ¡Por Dios!. Nada nos excita mas que un aroma natural (no exagerado, natural). Los olores corporales, los hombres, los llevamos con hidalguía. Nos olemos las medias después de jugar al fútbol, y nos olemos los pedos sin horrorizarnos. No creo que sea igual en el caso de las mujeres, ¿o si?)
Demasiados prejuicios. "Tampoco que seamos unas desatadas la primera vez, pero cuando escuchan demasiadas veces ‘No, eso no, porque no me gusta’, no les cae nada bien. No tener cuidado al acariciar o tocar. "No es ni un manubrio ni una palanca de cambios, el miembro masculino es una parte del cuerpo bastante delicada, por cierto".
(una mujer desatada, salvaje, y gritona, nos enloquece. Y mas nos enloquece cuando fuera de la cama se comporta como una reina. Vos, a todas luces, no podes separar una cosa de la otra.
Dejar marcas en la piel. "A menos que pidamos específicamente que nos dejen marcas, no lo hagan, porque no nos gusta".
(eso es mentira. las marcas (ocultas, por supuesto) son parte de las relaciones intensas. Lo que tenes que evitar es dejar el cuello como si hubieran intentado ahorcarte con una soga de barco)
No es una actriz porno. "Uno de los efectos negativos de la difusión a través de Intenet o DVD hacen que ellos crean que nos gusta que nos den chirlos, que nos maltraten o que nos hagan doler. En la mayoría de los casos, no nos gusta".
(a menos que sea un pedido explicito, no creo que nadie de por sentado que a alguien le guste que le peguen. Excepto vos, claro)
Para ellas, por supuesto, también hay algunas cuestiones que –según Kullock– deben grabarse a fuego con un "No debo" bien grande a continuación.
Perfumarse demasiado o descuidar algunos aspectos de la higiene personal. "Ni un extremo ni el otro, pero lo que sí es seguro es que ellos son mucho menos tolerantes con los olores corporales".
(¿¿¿quien te dijo esa idiotez??? ¡Por Dios!. Nada nos excita mas que un aroma natural (no exagerado, natural). Los olores corporales, los hombres, los llevamos con hidalguía. Nos olemos las medias después de jugar al fútbol, y nos olemos los pedos sin horrorizarnos. No creo que sea igual en el caso de las mujeres, ¿o si?)
Demasiados prejuicios. "Tampoco que seamos unas desatadas la primera vez, pero cuando escuchan demasiadas veces ‘No, eso no, porque no me gusta’, no les cae nada bien. No tener cuidado al acariciar o tocar. "No es ni un manubrio ni una palanca de cambios, el miembro masculino es una parte del cuerpo bastante delicada, por cierto".
(una mujer desatada, salvaje, y gritona, nos enloquece. Y mas nos enloquece cuando fuera de la cama se comporta como una reina. Vos, a todas luces, no podes separar una cosa de la otra.
Sos una pelotuda máxima (Zorreguieta))
Gritar demasiado. "En general, a ellos les gusta que una lo pase bien y disfrute, pero si el volumen de los gritos de placer es ensordecedor, puede ser contraproducente".
(Respondida aqui arriba. Y agrego, sos una idiota dando consejos)
Fingir orgasmos. "No les gusta, pero tampoco se dan cuenta si fue de verdad o fingido".
(Bueh...)
No decir lo que nos gusta. "Si las chicas son demasiado calladas y no son capaces de pedir lo que quieren o lo que les da placer, a ellos no les gusta" (esto se podría decir así : A los hombres, como a las mujeres, nos encanta la comunicación. Esa comunicación conlleva al goce de ambas partes, ya que si vos gozas, yo también, y si yo gozo, vos también, lo que nos envuelve en dos círculos viciosos, que nos llevan al orgasmo sincronizado (si, existe y me pasa siempre))
Criticar el propio cuerpo. "’Ay no, que tengo rollitos, no te puedo gustar’; ‘No, mis lolas no me gustan’ o ‘No me toques la panza que la odio’, son frases que no ayudan a mantener el fuego de la relación. Para gustar, antes hay que gustarse".
(Ya te dije, si nos gusta la pareja, nos importa mil carajos los rollitos... 1000 (mil) carajos. De hecho, los modelos femeninos en nuestras mentes no son Dolores Barreiro o alguna otra anoréxica de esas. No, nos gustan fuertes, poderosas, pulposas... supongo que por un instinto de conservación de la especie. Trata de aprender algo de lo escrito por miles de antropólogos y sexólogos)
Hablar de otros. "No hablo de fantasías eróticas, con eso está todo bien. Pero como a ellas, a ellos no les gusta que les cuenten las proezas sexuales de los que pasaron antes".
(Error. Una buena historia es un enorme aliciente para tratar de superar ese hito histórico y quedar como "la proeza mas grande de todos los tiempos")
Las referencias despectivas al miembro viril del compañero. "No se trata de decir todo el tiempo y acríticamente ‘¡Que grande que es!’, porque ellos tampoco son tontos y cada uno sabe lo que tiene. Lo mejor es no decir nada al respecto.
(si en algo acertaste, es que cada uno sabe lo que tiene. Pero si vos decís "ay, que grande que es, nunca vi nada igual" probablemente animes al mancebo a partirte en cuatro con su pequeño manicin. Idiota, no me cabe otro apelativo)
Como bien podemos ver, esta señora no le pegó ni a una sola. En algunos casos tal vez tenga cierto grado de razón.
Gritar demasiado. "En general, a ellos les gusta que una lo pase bien y disfrute, pero si el volumen de los gritos de placer es ensordecedor, puede ser contraproducente".
(Respondida aqui arriba. Y agrego, sos una idiota dando consejos)
Fingir orgasmos. "No les gusta, pero tampoco se dan cuenta si fue de verdad o fingido".
(Bueh...)
No decir lo que nos gusta. "Si las chicas son demasiado calladas y no son capaces de pedir lo que quieren o lo que les da placer, a ellos no les gusta" (esto se podría decir así : A los hombres, como a las mujeres, nos encanta la comunicación. Esa comunicación conlleva al goce de ambas partes, ya que si vos gozas, yo también, y si yo gozo, vos también, lo que nos envuelve en dos círculos viciosos, que nos llevan al orgasmo sincronizado (si, existe y me pasa siempre))
Criticar el propio cuerpo. "’Ay no, que tengo rollitos, no te puedo gustar’; ‘No, mis lolas no me gustan’ o ‘No me toques la panza que la odio’, son frases que no ayudan a mantener el fuego de la relación. Para gustar, antes hay que gustarse".
(Ya te dije, si nos gusta la pareja, nos importa mil carajos los rollitos... 1000 (mil) carajos. De hecho, los modelos femeninos en nuestras mentes no son Dolores Barreiro o alguna otra anoréxica de esas. No, nos gustan fuertes, poderosas, pulposas... supongo que por un instinto de conservación de la especie. Trata de aprender algo de lo escrito por miles de antropólogos y sexólogos)
Hablar de otros. "No hablo de fantasías eróticas, con eso está todo bien. Pero como a ellas, a ellos no les gusta que les cuenten las proezas sexuales de los que pasaron antes".
(Error. Una buena historia es un enorme aliciente para tratar de superar ese hito histórico y quedar como "la proeza mas grande de todos los tiempos")
Las referencias despectivas al miembro viril del compañero. "No se trata de decir todo el tiempo y acríticamente ‘¡Que grande que es!’, porque ellos tampoco son tontos y cada uno sabe lo que tiene. Lo mejor es no decir nada al respecto.
(si en algo acertaste, es que cada uno sabe lo que tiene. Pero si vos decís "ay, que grande que es, nunca vi nada igual" probablemente animes al mancebo a partirte en cuatro con su pequeño manicin. Idiota, no me cabe otro apelativo)
Como bien podemos ver, esta señora no le pegó ni a una sola. En algunos casos tal vez tenga cierto grado de razón.
Pero todo se debe ajustar a la persona con la cual estamos. Sabiendo interpretar los claros indicios que nos dan. Y punto.
A mi, por ejemplo, muchas parejas me pedían que ponga películas porno, y si bien no me gustan, porque se que todo lo que pasa ahí es mentira, cumplia con el pedido. Y como eso, miles de excepciones a estas reglas de oro que propone la anorgasmica descerebrada esta.
La verdad, que es una maravillosa forma de empezar el día, encontrar por ahí que hay alguien muchísimo mas pelotudo que yo...
Gracias Paola !
La verdad, que es una maravillosa forma de empezar el día, encontrar por ahí que hay alguien muchísimo mas pelotudo que yo...
Gracias Paola !
Perfume de Carnaval (Peteco Carabajal)
Me voy solo con mi suerte
la llevaré en mi recuerdo
bajo un añoso algarrobo
cortaba el aire un pañuelo
bailando una vieja zamba
yo le entregaba mis sueños.
El sol quemaba en la tarde
siluetas que parecían
fantasmas amarillentos
llenos de tierra y de vida
y yo rendido a tus ojos
sintiendo que me querías.
¡Ay!...Perfume de carnaval
ya nunca me he´i de olvidar
su piel llevaba el aroma
de flor y tierra mojada
bellos recuerdos que siempre
los guardo dentro del alma.
¡Ay! tiempo donde han quedado
donde he perdido mis sueños
quien sabe si ella se acuerda
de un viejo mes de febrero
y de aquel baile en el campo
y de mi amor verdadero.
No quise decirle nada
la amé en silencio esa tarde
y sobre sus trenzas negras
dejé mis coplas sentidas
me fui llevando sus ojos
un miércoles de cenizas.
¡Ay!...Perfume de carnaval
ya nunca me he´i de olvidar
su piel llevaba el aroma
de flor y tierra mojada
bellos recuerdos que siempre
los guardo dentro del alma.
(esta zamba resume bastante bien mi vida...)
la llevaré en mi recuerdo
bajo un añoso algarrobo
cortaba el aire un pañuelo
bailando una vieja zamba
yo le entregaba mis sueños.
El sol quemaba en la tarde
siluetas que parecían
fantasmas amarillentos
llenos de tierra y de vida
y yo rendido a tus ojos
sintiendo que me querías.
¡Ay!...Perfume de carnaval
ya nunca me he´i de olvidar
su piel llevaba el aroma
de flor y tierra mojada
bellos recuerdos que siempre
los guardo dentro del alma.
¡Ay! tiempo donde han quedado
donde he perdido mis sueños
quien sabe si ella se acuerda
de un viejo mes de febrero
y de aquel baile en el campo
y de mi amor verdadero.
No quise decirle nada
la amé en silencio esa tarde
y sobre sus trenzas negras
dejé mis coplas sentidas
me fui llevando sus ojos
un miércoles de cenizas.
¡Ay!...Perfume de carnaval
ya nunca me he´i de olvidar
su piel llevaba el aroma
de flor y tierra mojada
bellos recuerdos que siempre
los guardo dentro del alma.
(esta zamba resume bastante bien mi vida...)
martes, 8 de julio de 2008
Romper la rutina (final)
Tardó un poco, más bien bastante, en reaccionar. La aparición de su madre en escena, complicaba muchísimo mas las cosas. Ya bastante tenía en la cabeza Bruno como para sumarle una relación extinta, que su madre estaba intentando volver a la vida.
Llamó a la casa de Alfonso, para avisarle que no iba a ensayar esa tarde. Se comprometió a estar a la noche. Soportó estoicamente las chicanas que su amigo le aplicaba, porque estaba en falta, y se sabía culpable. Juró solemnemente estar a las 10 en el club, listo para arrancar el concierto. Cortó, y sintió que al menos un problema estaba a medio resolver. Por ahora, solo había que ir a buscar a Bárbara al aeropuerto.
El avión llegó puntual, y para Bruno eso era un buen indicio. Si bien estaba trayendo consigo más problemas que soluciones, al menos no había sumado otro punto en contra.
Bárbara llegó con varias valijas, el pelo suelto, y anteojos oscuros. Parecía una estrella de cine de los 60. Esta Bárbara era una muy diferente a la que Bruno recordaba yéndose, en un vuelo de Lufthansa, prometiendo volver. Y uno sabe que las promesas, usualmente, son hechas para romperse. No era esta la excepción para él. Bárbara estaba de visita, y de eso, Bruno, se acordaba a cada minuto.
Se abrazaron, con frialdad alemana de parte de Bruno, y con calidez Argentina, de parte de su madre. Era evidente que ella trataba de arreglar las cosas. Subieron las valijas al auto, y salieron lentamente a la autopista. Después de las primeras palabras, el silencio era espeso, y ella decidió cortarlo.
- Contame de tu vida – dijo mirando el paisaje
- ¿Mi vida?, bueno... mi papa murió, mi mamá me abandonó, toco en una banda, laburo en una oficina, y tengo dos mujeres en la cabeza. Ah, y este fin de semana, estoy a punto de volverme loco.
Bárbara lo miro sonriendo, y después volvió a mirar el paisaje de la autopista.
- Tu mamá no te abandonó hijo. Tu mamá los dejó crecer.
- Mi mamá no se acuerda de mi cumpleaños.
- Tu mamá es un ser humano.
- Mi mamá se fue cuando mas la necesitábamos.
Bruno se dió cuenta de que había herido más de lo que debía. Intentó en vano desdecirse, pero ella no acusó el golpe.
- Vos lo viviste como una traición hijo, y no fue así. Les dí 25 años de mi vida, sin pedir nada a cambio. Un tercio de mi vida se los dediqué a ustedes, cada noche, cada mañana, cada comida, cada cambio de pañal, cada llanto y cada risa. Creo que tenía derecho a alejarme un poco de todo y volver a mi país, a ver a mis familiares. A tratar de superar lo de papá.
Bruno no tuvo respuesta. Lo único que le había importado era que su madre no se acordaba de su cumpleaños. ¿Y que derecho tenía el de exigir?. Tuvo que reconocerlo, ella tenía algo de razón, aunque sus decisiones hubieran sido cuestionables.
- Nunca, en mi vida, dejé de amarlos, a cada uno de ustedes. Pero si vos…
- Ma, perdoname. No pensé las cosas asi como las planteas ahora.
- Una mamá nunca perdona… porque nunca se ofende con un hijo. Ya lo vas a entender...
Bruno tuvo que estacionarse en la banquina. Las lágrimas le nublaban la vista. Ahora que lo veía así, se daba cuenta de que había perdido años odiando a una persona que no lo merecía. Se bajó del auto, su madre también, y se fundieron en un abrazo interminable. Luego, se miraron en silencio, sin necesidad de palabras que expresaran sus arrepentimientos, sus disculpas, sus sentimientos. Volvieron a abrazarse, fuerte, como se abraza a un ideal, como se abrazan las enredaderas a los alambrados. Y el tiempo dejo de existir a su alrededor.
Llegaron al departamento. Evelyn y Marco esperaban sentados mirando la tele. Bruno les había avisado antes de salir, de que su madre venía de visita. Miraban con caras serias, aunque algo sorprendidos por el aire amigable que mostraba su hermano mayor. Las cosas, lentamente, apaciblemente, se fueron aclarando, y acomodando, hasta terminar con toda la familia abrazándose. Después de tres años, volvían a unirse como una verdadera familia. Barbara dijo entonces:
- Para esto volví hoy. Para arreglar las cosas. Y ahora siento que ya no quiero irme.
Bruno podría haber jurado, que vio a la foto de Camilo sonreír.
Llegó la noche, y con ella, el concierto en el club. Había mucha gente, y Bruno subió al escenario, junto con todos los demás integrantes. Estaba nervioso, nunca habían tocado para tanta gente, y sabía que un error, podía valerle la simpatía o el encono de todos.
Empezó por presentar a la banda por su nombre, e hizo algunos comentarios, cuando la vio a ella, ahí, en las primeras filas, que le sonreía y le hacia un gesto de que todo iba a salir bien. De pronto, se sintió con la confianza de quien se sabe capaz de todo. Hizo silencio, tomo el micrófono, y dijo:
- Este concierto está dedicado a Malena… - sonrió... y la señaló entre el público.
Y la banda comenzó a tocar.
Tocaron como nunca, la energía fluía de ellos, circulaba entre la gente y la embriagaba, y las letras de las canciones llegaban hasta el más duro de los corazones. Esa noche Bruno cantaba lo que sentía, y sentía lo que cantaba. La gente enloqueció, aplaudían cada ocurrencia, cada giro, y hasta cada error. El público estaba siendo encantado con el influjo de un cantante que se redescubría a sí mismo esa noche.
Cuando terminaron, se abrazó con todos sus compañeros, se felicitaron entre todos, y se despidieron con una alegría fuera de lo común. Todos sabían que ese había sido el mejor concierto que habían dado en su breve historia. Después, bajó a buscar a Malena.
Salieron juntos del lugar, y buscaron algún café donde comer algo, ya que habían pasado largamente la hora de la cena.
Bruno le agradeció el haber ido (ella sabía del concierto solo por un comentario hecho en la oficina). Le contó la locura que había sido su día, el reencuentro con su familia, la reconciliación, su sensación sobre el escenario… De pronto, sonó su celular.
- ¡Bruno!¡Habla Alfonso!
- ¿Qué paso Fonso?
- No me vas a creer… Vino un tipo, esta desesperado por grabar y firmar un contrato…
- ¿Queee?... ¡Me estas jodiendo!
- ¡Boludo!¡Mucha plata!¡Mucha!
- ¿Y cuando…?
- El lunes, nos espera en una oficina del centro.
Bruno no lo podía creer. Era demasiado para un solo día. Desde el momento en que se animó a hablarle a la rotisera, su vida había empezado a girar sin control, y hoy, parecía que ese huracán de tres días de duración se estaba disipando, y podía ver de nuevo el camino, pero este, era un camino completamente diferente.
Un cambio de actitud, y su vida se volvió impredecible. Una reacción en cadena que lo llevaba de un momento insignificante, a uno cada vez más importante.
Miró a Malena, le pidió disculpas, ya que tenía que salir por cinco minutos. Fue a la vereda, y llamo a la casa de Irma.
- Irma, habla Bruno
- Hola Brunito, ¿nos vemos hoy?
- No Irma, prefiero que no. Me encantas, sos hermosa, me partís la cabeza, pero no.
- ¿Por qué no?
Bruno se quedó en silencio, elaborando una respuesta, y de pronto sonrió.
- Porque mi vida esta cambiando, Irma.
- Bueno… me alegro por vos….
- …
- …
- Fue hermoso haberte conocido Irma.
- Si. Siento lo mismo Bruno.
- Te tengo que dejar… cuidate.
Se dijeron adiós, y se olvidaron mutuamente al instante posterior. Bruno volvió a la mesa, sonrió, y cenaron juntos, brindando por un futuro incierto, pero promisorio. Después de pedir la cuenta, Bruno se levantó, la ayudo a ponerse el abrigo y le dijo:
- Quiero que esto sea cosa de todos los días
- ¿Lo de cantar?
- No. Lo de ponerte el abrigo. Cuidarte. Estar a tu lado.
Malena sonrío tímida, y bajó la mirada. A ella le pasaba lo mismo, y por fin el se había dado cuenta.
- Acepto – dijo ella.
Bruno sonrío como un chico, feliz.
Al salir, le tomó la mano, suave al principio, firme después. Y sintió que ya no quería soltarla nunca más.
El lunes, Bruno no fue a trabajar.
El martes, presentó su renuncia.
Y desde entonces, todos los días, la va a buscar a la puerta de su antiguo trabajo…
lunes, 7 de julio de 2008
Romper la rutina III
Parte I - Parte II
Malena canta el tango como ninguna
Y en cada verso pone su corazón
A yuyo del suburbio su voz perfuma
Malena tiene pena de bandoneón
Era inevitable.
Con solo pensar su nombre, la voz de Adriana Varela golpeaba su mente martillando los recuerdos. En la mesita con ruedas del antiguo tocadiscos “portátil”, que había heredado de su padre, estaban esos viejos (y también algunos nuevos) discos de tango, concubinos por la fuerza con sus discos de rock, acomodados en la herrumbrada rejilla metálica de la parte inferior.
Tal vez allá en la infancia su voz de alondra
tomó ese tono oscuro de callejón,
o acaso aquel romance que sólo nombra
cuando se pone triste con el alcohol.
Malena canta el tango con voz de sombra,
Malena tiene pena de bandoneón.
La imagen de la tapa del disco de la gata apareció en su mente. Recordó la vieja mesita, el tocadiscos, las tardes de sábado, el viejo ausente. En ese instante, aparecieron buenos momentos vividos con su padre, Camilo.
Claro. Era inevitable.
“Bruno – le dijo don Camilo – la mujer de tus sueños va a llegar sin que la busques, porque esa es la magia que tiene esta vida… sabe lo que necesitamos sin siquiera preguntarnos. Los únicos que necesitamos preguntarnos todo el tiempo en busca de respuestas, somos los humanos. El tiempo vuela, dejá de preguntarte, y viví.”
Camilo, para dormirlos, les cantaba cuando el y sus hermanos eran chicos, canciones de los Rolling Stones, de Los Beatles, de Led Zeppelin, de Bob Dylan. Los dormía con música, para que soñaran con un mundo mejor. Sabía que a ellos, el tango y el folklore, por ahora, no les gustaba. Y el sabio Camilo, se reservó las zambas de Atahualpa para cuando fueran más grandecitos…
Extrañaba a papá Camilo, sus consejos, sus caricias, sus enojos, y sobre todo, extrañaba los domingos a la mañana de su infancia, cuando se despertaba temprano y se iba a la cama de los padres, a mirar tele, a charlar, o a desayunar, junto a sus hermanos, para luego levantarse tarde todos juntos y salir a comprar el diario y los fideos frescos, o ayudarlo a su padre a prender el fuego para el asado.
Tango, Beatles, Camilo, dulzura de padre, domingos de mate y facturas, felicidad, ternura, y otra vez Malena. La cadena de recuerdos lo conducía inexorablemente al mismo nombre.
Llegó al frente de su edificio. Abrió la puerta del palier, y llegó al ascensor. Marcó el 4 piso, cerró las puertas, y se dejó llevar. Una vez adentro del departamento, se recostó en el sofá, puso música, y se dedicó a relajarse con los ojos entrecerrados.
Sin embargo su imaginación estaba restringida, gobernada por la morocha rotisera, cruel asesina sexual enviada desde el mismísimo infierno. Cuando aparecía ella, su cabeza era el escenario de las obscenidades más hermosas, y su capacidad creativa se veía desbordada por las imágenes, los sonidos, los aromas, los sabores, y claro, las texturas. Y todo fluía como un huracán desbocado hasta que en el camino se atravesaba Malena, y entonces, todo lo que había sido incendiado y devastado y depredado, se convertía de pronto en una habitación blanca, con ventanales al mar y cortinas de voile, con pisos brillosos de madera y almohadones mullidos en el piso, todo pasaba a ser salado y con arena entre los dedos de los pies, todo estaba envuelto en un silencio arrullado por las olas rompiendo contra la playa. Las imágenes pasaban a ser amaneceres en el océano Atlántico, y atardeceres en el Pacífico, y la calma, y la paz, y el ensueño. Una calma y una paz que lo seducían y lo aterraban.
No pudo con su ansiedad, y se fue derecho al dormitorio.
La perspectiva de un fin de semana entero con esa lucha interna, lo dejo inmerso en aguas turbias, y casi hizo zozobrar las ganas de tocar con sus amigos en el club del barrio. Esa noche tenían una oportunidad para mostrar su música (una mas, después de miles), pero Bruno no podía pensar, ni tocar, en semejante estado. Sin embargo, sabia que no podía fallarles, o que tal vez, seria bueno juntarse con sus amigos a gritar un poco ese sábado por la tarde.
Se dejó ir, en sueños, como mecido en un bote de laguna, mientras las notas de Miles Davis lo acariciaban desde el living.
Sonó el teléfono, y se despertó sobresaltado. Nadie llamaba nunca a su casa.
- ¿Si?
- Bru, soy yo...
La voz en el teléfono lo terminó de despertar. El sopor se había ido de golpe. Nadie le decía “Bru”. Nadie, excepto mamá, y papá, pero claro, eso era imposible.
Mamá se había ido a vivir a Alemania el mismo año en que Camilo murió, dejándolos a todos atónitos con la decisión de volver a su patria. Los invitó a unírsele en el viaje, claro, pero ellos, grandes ya, con todas sus cosas acá, no quisieron saber nada.
Bruno había hablado dos veces con su madre desde aquel día, pero ya no le decía “Má”, ni ella insistía con “Bru”. Ella olvidaba usualmente sus cumpleaños, y después enviaba cosas caras para pedir disculpas. Y a Bruno, le habian enseñado que las caricias son invaluables.
No. Las cosas habían cambiado bastante desde que pasó lo que pasó.
- … ¿¿Mamá??
- Si. Soy yo, estoy en el aeropuerto de Ezeiza.
- …P… pero… cuan… ¿cuándo….?
- Te mandé un correo avisandote.
- No sabía nada.
- Ahora voy para aeroparque, y en 2 horas estoy en Córdoba.
- ¿Y para qué…?
- ¡Ay! ¡Te dejo, te dejo!¡Se me va el avión!¡En un rato nos vemos!.
Colgó. Sin dudas, ese sería un fin de semana inusual.
Por fin su rutina se estaba resquebrajando, y en menos tiempo del que imaginaba, la vería desarmarse en mil pedazos.
Malena canta el tango como ninguna
Y en cada verso pone su corazón
A yuyo del suburbio su voz perfuma
Malena tiene pena de bandoneón
Era inevitable.
Con solo pensar su nombre, la voz de Adriana Varela golpeaba su mente martillando los recuerdos. En la mesita con ruedas del antiguo tocadiscos “portátil”, que había heredado de su padre, estaban esos viejos (y también algunos nuevos) discos de tango, concubinos por la fuerza con sus discos de rock, acomodados en la herrumbrada rejilla metálica de la parte inferior.
Tal vez allá en la infancia su voz de alondra
tomó ese tono oscuro de callejón,
o acaso aquel romance que sólo nombra
cuando se pone triste con el alcohol.
Malena canta el tango con voz de sombra,
Malena tiene pena de bandoneón.
La imagen de la tapa del disco de la gata apareció en su mente. Recordó la vieja mesita, el tocadiscos, las tardes de sábado, el viejo ausente. En ese instante, aparecieron buenos momentos vividos con su padre, Camilo.
Claro. Era inevitable.
“Bruno – le dijo don Camilo – la mujer de tus sueños va a llegar sin que la busques, porque esa es la magia que tiene esta vida… sabe lo que necesitamos sin siquiera preguntarnos. Los únicos que necesitamos preguntarnos todo el tiempo en busca de respuestas, somos los humanos. El tiempo vuela, dejá de preguntarte, y viví.”
Camilo, para dormirlos, les cantaba cuando el y sus hermanos eran chicos, canciones de los Rolling Stones, de Los Beatles, de Led Zeppelin, de Bob Dylan. Los dormía con música, para que soñaran con un mundo mejor. Sabía que a ellos, el tango y el folklore, por ahora, no les gustaba. Y el sabio Camilo, se reservó las zambas de Atahualpa para cuando fueran más grandecitos…
Extrañaba a papá Camilo, sus consejos, sus caricias, sus enojos, y sobre todo, extrañaba los domingos a la mañana de su infancia, cuando se despertaba temprano y se iba a la cama de los padres, a mirar tele, a charlar, o a desayunar, junto a sus hermanos, para luego levantarse tarde todos juntos y salir a comprar el diario y los fideos frescos, o ayudarlo a su padre a prender el fuego para el asado.
Tango, Beatles, Camilo, dulzura de padre, domingos de mate y facturas, felicidad, ternura, y otra vez Malena. La cadena de recuerdos lo conducía inexorablemente al mismo nombre.
Llegó al frente de su edificio. Abrió la puerta del palier, y llegó al ascensor. Marcó el 4 piso, cerró las puertas, y se dejó llevar. Una vez adentro del departamento, se recostó en el sofá, puso música, y se dedicó a relajarse con los ojos entrecerrados.
Sin embargo su imaginación estaba restringida, gobernada por la morocha rotisera, cruel asesina sexual enviada desde el mismísimo infierno. Cuando aparecía ella, su cabeza era el escenario de las obscenidades más hermosas, y su capacidad creativa se veía desbordada por las imágenes, los sonidos, los aromas, los sabores, y claro, las texturas. Y todo fluía como un huracán desbocado hasta que en el camino se atravesaba Malena, y entonces, todo lo que había sido incendiado y devastado y depredado, se convertía de pronto en una habitación blanca, con ventanales al mar y cortinas de voile, con pisos brillosos de madera y almohadones mullidos en el piso, todo pasaba a ser salado y con arena entre los dedos de los pies, todo estaba envuelto en un silencio arrullado por las olas rompiendo contra la playa. Las imágenes pasaban a ser amaneceres en el océano Atlántico, y atardeceres en el Pacífico, y la calma, y la paz, y el ensueño. Una calma y una paz que lo seducían y lo aterraban.
No pudo con su ansiedad, y se fue derecho al dormitorio.
La perspectiva de un fin de semana entero con esa lucha interna, lo dejo inmerso en aguas turbias, y casi hizo zozobrar las ganas de tocar con sus amigos en el club del barrio. Esa noche tenían una oportunidad para mostrar su música (una mas, después de miles), pero Bruno no podía pensar, ni tocar, en semejante estado. Sin embargo, sabia que no podía fallarles, o que tal vez, seria bueno juntarse con sus amigos a gritar un poco ese sábado por la tarde.
Se dejó ir, en sueños, como mecido en un bote de laguna, mientras las notas de Miles Davis lo acariciaban desde el living.
Sonó el teléfono, y se despertó sobresaltado. Nadie llamaba nunca a su casa.
- ¿Si?
- Bru, soy yo...
La voz en el teléfono lo terminó de despertar. El sopor se había ido de golpe. Nadie le decía “Bru”. Nadie, excepto mamá, y papá, pero claro, eso era imposible.
Mamá se había ido a vivir a Alemania el mismo año en que Camilo murió, dejándolos a todos atónitos con la decisión de volver a su patria. Los invitó a unírsele en el viaje, claro, pero ellos, grandes ya, con todas sus cosas acá, no quisieron saber nada.
Bruno había hablado dos veces con su madre desde aquel día, pero ya no le decía “Má”, ni ella insistía con “Bru”. Ella olvidaba usualmente sus cumpleaños, y después enviaba cosas caras para pedir disculpas. Y a Bruno, le habian enseñado que las caricias son invaluables.
No. Las cosas habían cambiado bastante desde que pasó lo que pasó.
- … ¿¿Mamá??
- Si. Soy yo, estoy en el aeropuerto de Ezeiza.
- …P… pero… cuan… ¿cuándo….?
- Te mandé un correo avisandote.
- No sabía nada.
- Ahora voy para aeroparque, y en 2 horas estoy en Córdoba.
- ¿Y para qué…?
- ¡Ay! ¡Te dejo, te dejo!¡Se me va el avión!¡En un rato nos vemos!.
Colgó. Sin dudas, ese sería un fin de semana inusual.
Por fin su rutina se estaba resquebrajando, y en menos tiempo del que imaginaba, la vería desarmarse en mil pedazos.
viernes, 4 de julio de 2008
Verdades mas grandes que la c... de tu hermana
Tener nombre, o apodo de mina, aumenta las visitas en un blog.
Comprobalo por tus propios medios.
Y si podes, refutamelo.
Comprobalo por tus propios medios.
Y si podes, refutamelo.
Miau !
Creeme. Ahora, el sildenafil (la marca comercial es "Viagra"), se vende en los kioscos, y se ofrece en el mismo exhibidor de los preservativos Prime.
Para este mediodia, prometo postear la foto.
Para este mediodia, prometo postear la foto.
jueves, 3 de julio de 2008
Mal jueves
Me reintegré a mis tareas habituales, y lo primero que me dicen es que el lunes 30, mataron al hijo de un ex compañero de trabajo. Lo conocia personalmente, tanto al padre, como al hijo. Y aun ahora no lo puedo creer.
Mal Jueves. Sinceramente no tengo ganas de seguir escribiendo.
http://www2.lavoz.com.ar/08/06/30/secciones/sucesos/nota.asp?nota_id=217948
Mal Jueves. Sinceramente no tengo ganas de seguir escribiendo.
http://www2.lavoz.com.ar/08/06/30/secciones/sucesos/nota.asp?nota_id=217948
miércoles, 2 de julio de 2008
Gatonoticias
Desde el viernes al mediodía, estoy sufriendo ataques fulminantes de tos, estornudos, fiebre, dolores en el pecho y espalda, tránsito a velocidad ultrasónica (sin necesidad de activia), caspa, y meteorismo.
Varios médicos me han visto, pero ninguno me dice nada. Lo único que hacen es darme reposo. Y si bien es una suerte poder quedarme en casa cultivando mandrágoras, también esto conlleva a los reclamos de las tareas domesticas incumplidas. Claro, si el señor esta al reverendo pedo todo el día, ¡podría al menos lavar los platos!.
Si, podría.
También podría estar muriendo... pero ni eso se puede hacer en paz en esta casa.
Ruego recuperarme pronto para poder volver al trabajo, y de ahí, seguir escribiendo tranquilo para ustedes.
Varios médicos me han visto, pero ninguno me dice nada. Lo único que hacen es darme reposo. Y si bien es una suerte poder quedarme en casa cultivando mandrágoras, también esto conlleva a los reclamos de las tareas domesticas incumplidas. Claro, si el señor esta al reverendo pedo todo el día, ¡podría al menos lavar los platos!.
Si, podría.
También podría estar muriendo... pero ni eso se puede hacer en paz en esta casa.
Ruego recuperarme pronto para poder volver al trabajo, y de ahí, seguir escribiendo tranquilo para ustedes.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)