lunes, 23 de febrero de 2009

La infiel II - La playa loca

- Sabías muy bien que esto era así. No me rompas las pelotas.

Cortó. Esa llamada le recordaba épocas de romances de adolescencia. Y por eso se había indignado. Recordó la palabra "tirifilo" y se rió sola en la cocina mientras empezaba a preparar la cena.

- ¿Quién era? - inquirió con desconfianza él.
- Mi vieja... me recriminaba otra vez que no le llevamos al nene el fin de semana...
- Ahora la llamo...
- No. Dejá las cosas así.
- ¿Pero quien carajo se cree que es? - intentó herir para evitar la cama mas tarde.
- ¡Es mi vieja!¡Y para solucionar los quilombos con mi vieja estoy yo, y no necesito vocero!

Se quedó otra vez con esa sensación de impotencia, de dientes apretados y golpes de cuchillo contra la tabla de picar. Golpes excesivos para la fragilidad de un pobre tomate.

Matías corrió y se colgó de la ropa de su madre, como hacía cada vez que ella empezaba a cocinar, o cuando intentaba ir al baño, o peinarse, o cepillarse los dientes, o lo que fuera que hiciese.

Se acostumbró a bañarse a las seis de la mañana, mientras el nene y su esposo dormían, para poder hacerlo tranquila. Hacía años que depilarse era una misión imposible, y ni hablar de salir a correr, algo que le ayudaba a mantener la cabeza despejada.

Mientras cortaba las zanahorias, le volvió el recuerdo del que se autoproclamaba "amante". No podía creerlo. Ahora, exigía verla mas seguido. Exigía. "¡Como si tuviera algún derecho!" pensó ella.

- Poné la mesa... por favor - le pidió al hombre tirado en el sillón

Vino arrastrando los pies.

- ¿Donde están los platos?
- En el mismo lugar en el que están hace cinco años Luis.
- Y los vasos también... y los cubiertos... ¿no?
- Y muchas otras cosas también. Como esta relación.
- Frente a Matías no...
- Esta noche, vamos a hablar muy seriamente.

El se fué, con los platos, cubiertos y vasos haciendo equilibrio.

- ¿Y el mantel? - Gritó desde el comedor.

Carola golpeó secamente la tabla, y miró al techo suspirando. Hizo unos segundos de pausa. "en el cajón del aparador, al lado de mi corazón" pensó.

- En el cajón del aparador Luis... ese grande, que está cerca de la mesa.
- Ya lo encontré... - suspiró él mientras ponía la mesa con desgano mirando el TV.

De golpe, uno de los vasos se cayó, haciéndose pedazos.

- ¿Donde está el escobillón? - dijo Luis

"Tengo dos charlas importantes pendientes" pensó. "Curioso, las dos son parecidas".

10 comentarios:

GABU dijo...

¡Oia!

Me encontrè con cantidàt de similitudes con mi real realidàt...

P.D.:Pero ya sabemos que la letra chica siempre dice cualquier similitud con la realidad es mera coincidencia

¿NO?
o_O

BESOTEP CON "MEA CULPA"

El gato vagabundo dijo...

Gabu, cualquier similitud significa que todos pasamos por cosas mas o menos parecidas.

Yo tambien pregunto donde están las ollas cada vez que cocino. Pero en mi caso, sucede que cuando vienen mis suegros guardan todo donde creen que van las cosas.

Así que tengo que encontrarlas, lavarlas otra vez, y usarlas.

Que le vamo hacer!

Nati Alabel dijo...

epa, no me lo esperaba! creí que La Infiel era un post autoconclusivo. Mejor así, muero por leer esas charlas pendientes...

Andrea dijo...

muy bueno, me gusta como escribis! espero ansiosa la tercer parte!!!

Claudio G. Alvarez Tomasello dijo...

Todo muy bien, pero me mata el estilo "a cuentagotas". Ya se que es así. Pero por lo menos me queda el reclamo.
No es vida.

Laura dijo...

Gatito!!...celebro que decidieras seguir con la historia. Bah, no sé si es la misma historia...yo me la imaginé así
Es muy cierto eso de que todos pasamos por situaciones parecidas pero te aclaro que no vale echarle la culpa a los suegros, ustedes (la mayoría, claro) tienen ese "gen" defectuoso que les hace preguntar donde esta esto o aquello en cada circunstancia. A veces creo que lo poseen exclusivamente para exasperarnos a nosotras.
Metele pata a la parte III, please

Tampax Ultra dijo...

Lo de las preguntontas es una cosa que nos viene con la convivencia. Como que nos aburguesamos porque dejamos descansar todo lo de la casa sobre ellas.
Cuando vivía solo yo cocinaba, yo lavaba, yo barría (de vez en cuando), yo todo. Ahora hace años que no me preparo una valija.
Ojo, no es por esclavizador, de hecho me caía mal al principio. Es porque ella lo hace sin preguntar y, poco a poco, abandoné la tarea en sus manos.
Eso sí, si se olvida de poner el cepillo de dientes o los calzoncillos no hay que armar lío, se compra uno nuevo y listo. Si pregunta (y sólo si pregunta) se le dice "es que te olvidaste de ponerlo", con voz edulcorada. Todo lo demás suea a reclamo y es causal de discusión.

Anónimo dijo...

Por qué se llama la playa loca? Me perdí en alguna parte?

El gato vagabundo dijo...

Natalia: Era. Pero hay mucho mas por contar. No podía quedar solo en el hecho.

Andre: Gracias!. Ya viene la III.

Claudio: Pero si publico un texto de ocho monitores de largo, no lo lee nadie!. Igual se le toma el reclamo. Anote el numero: DX883662672675275535523441288F24N. Gracias por llamar...

Laura: Somos asi porque nos implantaron ese gen. Igual no es excusa para que cada tanto no agarremos la lustra aspiradora y le saquemos un poquito de brillo al piso.

Tampax: Vos lo dijiste mejor que nadie. Yo tambien viví solo, y hacia todo, y lo mejor es que me encantaba hacerlo. Creo que dejé cuando me dijeron "asi no, está mal, dejá que lo hago yo".

Ceci: Es gracias a un boludo de compañero de la secundaria. Cuando salió la película "Bañeros II - La Playa Loca" este pibe trabajaba en un video club. Y rompió tanto las pelotas con bañeros 2 la playa loca, que cada vez que escucho algo "2", inmediatamente sale la frase del subconsciente.

Mona Loca dijo...

Obviamente el Mono también preguntan dónde están las cosas de uso diario...a lo que yo respondo: "Vos vivís en esta casa?"

Un día me va a decir que no, y...qué chasco,eh!

( para descomprimir, simplemente)

Usté se da cuenta de que todos están esperando la parte III? La tiene?
Cada cuentito es una unidad en sí mismo, y yo no pensé que fuera la continuación del otro!!!
Pero bueno, no se sorprenda, soy medio descuelgue.


("tirifilo": jajajajaaaaaaaaaaa. Lo quiero. Ya sabía,no?)