jueves, 28 de abril de 2011

Don Vargas Llosa

El Nobel de Literatura dijo que los jóvenes que chatean piensan como "monos".



El Premio Nobel de Literatura peruano Mario Vargas Llosa considera que "los jóvenes" que acortan las palabras y vulneran las reglas gramaticales en los chats de internet o en Twitter y Facebook piensan "como un mono", según una entrevista publicada hoy en el semanario uruguayo Búsqueda.

"El Internet ha acabado con la gramática, ha liquidado la gramática. De modo que se vive una especie de barbarie sintáctica", afirmó el autor de "Conversación en La Catedral", de 75 años, en una larga entrevista publicada este jueves. “Si escribes así, es que hablas así; si hablas así, es que piensas así; y si piensas así, piensas como un mono. Eso me parece preocupante”.

Entre otras cosas opinó que los diarios viven un momento "difícil" y se han contagiado de las ganas que tiene la gente de "entretenerse y divertirse" cuando abre un periódico, un fenómeno del que no escapa la prensa seria inglesa ni la española.

Algo similar sucede con el arte plástico y con la literatura, según Vargas Llosa, para quien los escritores jóvenes latinoamericanos "se ríen a carcajadas" cuando "se les habla de compromiso literario" y aceptan que "la literatura es una forma de entretenimiento muy elevada".

Sin embargo, sus palabras más duras fueron para el lenguaje que usan "los jóvenes" en internet o en los dispositivos móviles, que calificó de "aterrador".

"Si escribes así, es que hablas así; si hablas así, es que piensas así, y si piensas así, es que piensas como un mono. Y eso me parece preocupante. Tal vez la gente sea más feliz si llega a ese estado. Quizás los monos son más felices que los seres humanos. Yo no lo sé", sentenció.

Por último, Vargas Llosa confesó que la novela que más le ha impresionado en los últimos tiempos es "Soldados de Salamina", del español Javier Cercas, aunque admitió que en la actualidad lee "mucho más a los muertos que a los vivos".









Hasta ahí, la nota publicada en La Voz del Interior.





Cuando me hablaron maravillas de Vargas Llosa, claro, lo primero que hice fue agarrar un libro suyo.





Y no me gustó ni su estilo, ni su forma de administrar los tiempos o los personajes. Probé otro libro. Tal vez hubiera tenido mala suerte de principiante. Pero no.





Su segundo libro me resultó peor.





Entonces, definí que no me gustaba el escritor Vargas Llosa. Aunque, claro, fue premiado con el Nobel de literatura, pero a mi no me llegaba...





Entonces pensé que tal vez, el del problema fuera yo y no un escritor consagrado por la industria mundial.








Hasta que hace un tiempo empezó a aparecer asiduamente en los medios, con declaraciones de un estilo, casi podría decir, maleducado. Y también sus despotriques contra todo lo que va contra su forma de pensar. En Argentina, según el, somos todos monos y bárbaros. Mas o menos lo que creen los Estadounidenses desde que Disney hizo la película donde Tribilín (no me convence Goofy) era un gaucho.








Me doy cuenta que el señor Vargas Llosa cae entonces en el defecto por excelencia: la generalización. Lo que a el no le gusta, está rotundamente mal.








Y me parece que estamos en tiempos donde no soy yo quien debería plantearse la forma de pensar.





A mi, el señor Vargas Llosa me tiene cansado de sus "declaraciones" que buscan el conflicto. Me tiene lisa y llanamente harto.








Lo que me lleva a la definición transitoria hasta que me demuestre mi error, que no me gusta el señor Vargas Llosa, ni su obra, ni nada que lo identifique.











Por cierto, chateo, soy "blogger", y creo ser un joven escritor latinoamericano en formación. Y no me siento identificado con sus declaraciones, y a diario, intento mejorar tanto mi vocabulario como mi sintaxis, en pos de la mejora de mi idioma.





Lamentablemente, señor Vargas Llosa, generalizando se ha usted equivocado. Una vez mas.

3 comentarios:

Nati Alabel dijo...

A mí me encanta cómo escribe Vargas Llosa, y le perdono las boludeces que habla. Porque son eso...boludeces nomás.

Viejex dijo...

Yo leí dos libros de él: uno no me gusto, pero hay otro que me pareció maravilloso. Se llama "El hablador".

Lo de las entrevistas son tonterías a las que yo no le doy importancia. Menos cuando son tan generales.Todas las generalizaciones son estúpidas

Claudio G. Alvarez Tomasello dijo...

Diego:

Recomiendo "La ciudad y los perros", "Pantaleón y las visitadoras" y -para mí, muy divertida- "La tía Julia y el escribidor"

Un dato curioso: Cuando aparecen personajes argentinos o se menciona el país, siempre es para denostarlo, con palabras llenas de odio. Hay que saltearse como uno pùeda la bronca que nos genera y seguir leyendo.

Por lo demás, ha demostrado ser un converso.
De esos vomitables.